De la Redacción
PLAYA DEL CARMEN, SOLIDARIDAD, 13 de enero.- Un infante de apenas tres años de edad resultó herido de bala durante el ataque a tiros de una casa en la populosa colonia Luis Donaldo Colosio Murrieta, lo que echa a la borda el desgastado discurso oficial que los ataques se dan entre grupos rivales del crimen organizado y los sicarios que se transportaban en una motocicleta, según versión de testigos se dieron a la fuga sin mayor dificultad, en tanto que los agentes de la Policía Municipal Preventiva (PMP) que fungieron como primer respondiente quizás para ocultar su incapacidad o complicidad con el grupo delincuencial que realizó el ataque manifestaron “no pasa nada”.
Alrededor de las 20:10 horas del sábado, la señora Guadalupe C. R. de 30 años de edad, con domicilio en la avenida 20 con calle 102, se encontraba sentada detrás del portón metálico de su casa con su pequeño hijo de tres años, cuando escuchó tres estallidos similares a los petardos, asustándose ambos y de inmediato la pequeña víctima de la narco-violencia comenzó a llorar diciendo que le había quemado la rodilla derecha, por lo que su madre lo metió al cuarto y al revisarlo se percató que tenía un rozón, razón por la cual llamó al número de emergencias 911 pidiendo el auxilio de los paramédicos de una ambulancia y la presencia de la Policía Municipal Preventiva (PMP).
Los paramédicos llegaron al domicilio y al revisar la herida del niño se percataron que fue provocado por un balazo, por lo que procedieron a brindarle los primeros auxilios, sin que fuera necesario su traslado al hospital para atención médica, ya que, por fortuna la bala que pudo quitarle la vida, sólo rozó su rodilla derecha, lo que exhibe que la víctimas de la narco-violencia no se limita al ajuste de cuentas entre bandas rivales del crimen organizado, sino cualquiera puede ser víctima; sin embargo, las autoridades federales, estatales y municipales siguen exhibiendo su incapacidad para combatir a los siete grupos criminales que se disputan impunemente el control de las actividades delincuenciales.
La Policía Municipal Preventiva como siempre solamente se limitó a acordonar la “escena del crimen” porque no hay prevención del delito e incluso para tratar de ocultar su incapacidad o complicidad con el grupo delincuencial que realizó el ataque manifestaron a reporteros de los medios de comunicación y a los vecinos “no pasa nada”, lo que causó indignación entre los residentes porque un infante estuvo a punto de morir por una bala perdida, y minimizaron el sangriento hecho.
Finalmente, arribaron las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) quienes al revisar el portón metálico de la casa baleada encontraron tres orificios de bala; sin embargo, los sicarios al parecer usaron una pistola tipo revólver, ya que no se encontraron casquillos percutidos, lo que dificultará las investigaciones para dar con los responsables del ataque armado.