Síguenos

Última hora

Guardia Nacional reporta caída del 55% en robos a transportistas en autopistas México-Querétaro y México-Puebla

Quintana Roo

Donceles 28, bajo el agua

Por Yolanda Gutiérrez

Viviendas y comercios de la colonia Donceles 28 sufrieron los estragos de las fuertes precipitaciones registradas a causa de la onda tropical número 46, al subir el agua de nivel e ingresar en los inmuebles, con las consiguientes afectaciones, que se recrudecían al paso de los vehículos, que levantaban a su paso enormes olas que provocaban un caos mayor.

Más de 200 familias en la Donceles 28 no terminan de acostumbrarse a que la mayor parte de su colonia se inunde cuando llueve y, si las precipitaciones son fuertes y continuas, sufran las consecuencias todos y cada uno de los residentes, esto en virtud que, según mencionó doña Catalina Izquierdo, en esas circunstancias el nivel del agua sube hasta 20 centímetros y no sólo en algunas calles sino en toda la colonia.

Se habló con dos amas de casa que salían de una pequeña tienda de abarrotes con algunos artículos entre los que no podía faltar el refresco de cola familiar, quienes se quejaron de que los pozos de absorción que construyó el Ayuntamiento no sirven para nada y, peor, aún, no se prendieron las bombas a tiempo, lo que provocó severos encharcamientos en algunas calles, concretamente las más cercanas al desarrollo de Puerto Cancún.

Para colmo, con el exceso de lluvia se rebosan los registros de drenaje y en las calles se mezclan las aguas negras con las pluviales, lo que origina un olor desagradable que también se mete en los hogares.

Además, según estas dos amas de casa, las precipitaciones siempre provocan que las aguas negras broten de sus bacines y cifas, motivo por el que se enfrentan, además a los fétidos olores provocados por la pésima infraestructura hidráulica.

Catalina Izquierdo vive en la colonia Donceles 28 desde hace más de 20 años y comentó que “desde que llegamos aquí la problemática de las inundaciones ha sido la misma, con la diferencia de que antes enseguida bajaban los niveles y todo se normalizaba porque el exceso de agua se iba para el manglar, pero desde que los de Puerto Cancún levantaron su barda la situación se recrudeció porque el agua no tiene para dónde irse y se queda estancada, a veces por dos o tres días, sin contar con el lodo mezclado con aguas negras de los registros que se rebosan”.

En el mismo tenor se pronunció Luis Bermejo, quien expresó que la colonia siempre ha tenido problemas cuando se presenta un mal tiempo acompañado de fuertes lluvias, situación que se solucionó a medias después de que se construyeran algunos pozos de absorción, que no siempre trabajan al cien por ciento porque en muchas ocasiones se azolvan y ya no pueden almacenar el agua de lluvia.

Posteriormente se habilitaron bombas de achique que, según los mismos vecinos, sirven para muy poco ya que generalmente se prenden cuando ya las vialidades están inundadas, hasta el punto que el agua se mete en muchas casas y alcanza niveles de más de diez centímetros.

“Hemos padecido lo indecible desde que se empezó a construir Punta Cancún porque entonces se procedió a rellenar el mangle para poder levantar las torres de condominios, lo que provocó que, al llover, toda el agua se quedase acumulada sobre la calle y terminara dentro de nuestras casas”, concluyó don Luis, residente en la colonia por más de 25 años.

Siguiente noticia

Playas vacías este miércoles