Por Ernesto Escudero
De los cerca de 180 mil trabajadores de la construcción contemplados en todo el estado, el 50 por ciento, aproximadamente, laboran en el municipio Benito Juárez; todos ellos, a partir de ayer sábado, recibieron la indicación de suspender sus actividades y retirarse a sus casas, como parte de las medidas de prevención sanitaria en contra del coronavirus COVID-19, compartió el presidente del Sindicato de Trabajadores, Obreros y Empleados de la Industria de la Construcción en Quintana Roo (SITEC), José Pech Alfaro.
“En el municipio de Benito Juárez son como 80 ó 90 mil trabajadores quienes básicamente se van a sus casas, pues desde inicios de esta semana se comenzó a informar a todos los desarrollos de casas habitación y departamentos como Cumbres, Lagos del Sol, Aqua y Puerto Cancún, entre muchos otros, que este fin de semana se procedería a esta suspensión de labores en el tema de la construcción, para posiblemente retomar actividades el 19 de abril, aunque eso dependerá de cómo se vaya presentando el panorama por esta contingencia”.
Detalló que ante esta situación los patrones deben cuidar a sus trabajadores y no hacer despidos injustificados y cumplir con el pago del salario mínimo u otros esquemas planteados por otros sectores productivos.
Hasta este sábado, dijo que no tenían registrada ninguna queja de despido injustificado y estarán pendientes de que no ocurra.
“Sabemos que un elevado número de quienes trabajan en la construcción vienen de otros estados de la República y aunque tenemos conocimiento de que muchos se han regresado a sus lugares de origen, también es cierto que muchos se quedan aquí y estarán buscando pequeños trabajos que hacer en las casas de la ciudad, obvio para poder hacerse de algún dinerito para ellos y sus familias”, comentó.
Pech Alfaro manifestó que al no existir en estos momentos proyectos del rubro de obra pública, la suspensión de la actividad de construcción obedece literalmente a desarrollos privados, de donde lograba subsistir la mayoría de estos trabajadores.
La actual situación generada por la emergencia sanitaria hace que el panorama no sea alentador, por ello la determinación de mandar a estos empleados del sector de la construcción a sus casas.