Una familia lamentó abusos de la Policía de Investigación, cuyos elementos ingresaron a su domicilio y, lejos de cumplir con labores de indagación, se apoderaron de bienes y objetos de valor.
Julián N. condenó que continúen ocurriendo este tipo de actividades por parte de las autoridades, como la Fiscalía General del Estado (FGE), a través de la Policía de Investigación.
“Una disculpa, nos equivocamos”, dijeron como justificación a la familia, luego que allanaron su vivienda en la colonia Jesús Martínez Ross, presuntamente bajo el amparo de una orden judicial.
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Durante el operativo les fueron sustraídas pertenencias, entre ellas más de 6 mil pesos en efectivo, incluso la alcancía de una menor. También se llevaron perfumes y el dinero de becas escolares, limitándose a ofrecer una disculpa.
El afectado señaló que resulta inaceptable la conducta de estos agentes, quienes forzaron la puerta principal, dañaron cámaras de seguridad y se retiraron con costales llenos de artículos de valor, pese a no encontrar evidencia de hechos ilícitos.
La familia analiza interponer una denuncia y acudir a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para que el caso sea investigado por una instancia distinta, ante el riesgo de encubrimiento dentro de la misma dependencia.
El cateo se llevó a cabo la noche del sábado en un domicilio sobre la avenida Constituyentes, entre las calles 73 y 75, en la colonia Jesús Martínez Ross, aparentemente en cumplimiento de una orden judicial como parte de una investigación en curso.
