Jacqueline y Daniela se reencontraron con su mamá Marta, y como destino escogieron Cancún. El motivo de su viaje fue celebrar el cumpleaños número 50 de su madre y como regalo, decidieron invitarla para conocer el Tren Maya. Ellas viven en Carolina del Norte, mientras que su mamá reside en San Luis Potosí, por lo que no se ven con frecuencia.
Ambas se encontraban emocionadas por estar en un destino turístico como este y, además, por conocer por primera vez el ferrocarril. Se dirigían a Playa del Carmen, y se habían informado sobre el tren a través de redes sociales y televisión, viendo fotografías que las sorprendieron por los colores del tren, su tamaño y por los lugares por donde pasa el tren, los cuales les habían generado expectativas.
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Jacqueline, destacaba en los pasillos de la terminal Cancún, por su amor incondicional al color rosado. Desde pequeña, su vestimenta y accesorios siempre incluían este tono, lo que se reflejaba en cada detalle de su estilo personal. Incluso, presumía con orgullo una bolsa artesanal de color rosa que adquirió en Chichen Itzá, que era un complemento perfecto para su look. Jacqueline es estudiante de sonografía, una disciplina que combina la creatividad y la atención al detalle, cualidades que también se reflejan en su gusto por el color rosado y su estilo único.
Por otro lado, está Daniela, quien es estudiante de radiología, desesperada porque llegará el momento de conocer el tren. Ambas hermanas comparten su experiencia como estudiantes, destacando que, aunque es difícil, aprender nuevas cosas las motiva a continuar y cuando pueden aprovechan para visitar a su madre, y hacer viajes como el que realizaron en el Tren Maya.
La emoción de descubrir conceptos innovadores y aplicarlos en su campo de estudio es lo que las impulsa a superar los desafíos y mantener su entusiasmo por aprender.
A pesar de estar lejos de su mamá, Jacqueline y Daniela destacan que estar nuevamente conviviendo y celebrando su cumpleaños es una forma de fortalecer el vínculo que siempre han tenido. Disfrutar de momentos especiales juntas, como viajar en el Tren Maya, les permite revivir recuerdos y crear nuevos, fortaleciendo aún más su relación familiar.
