
Con el fin de respetar la voluntad y la integridad de las personas que se encuentran en etapa terminal, el diputado Hugo Alday Nieto presentó la iniciativa con Proyecto de Decreto para la creación de la Ley de Voluntad Anticipada ante el Congreso del Estado, con la cual, además, se adicionaría el artículo 109 Bis al Código Penal de Quintana Roo.
Al respecto, la propuesta de Alday Nieto busca que se garantice el respeto a los derechos humanos, la autonomía y la dignidad de los pacientes médicos que atraviesan la etapa termina, de modo que puedan expresar su voluntad anticipada sobre los tratamientos que deseen recibir o no, para que tengan acceso a cuidados paliativos o alternativos integrales, que sean adecuados para tratar dolores hasta que se alcance la muerte digna.

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En ese sentido, el diputado explicó: “Esta ley no se trata de legalizar la eutanasia, sino de dar certeza jurídica humana a las y los pacientes en etapa terminal. Es reconocer su derecho a decidir, a no sufrir dolor innecesario y a despedirse en paz, acompañados de sus seres queridos”. Asimismo, hizo hincapié en que la voluntad anticipada y la eutanasia son dos criterios muy distintos, puesto que con la voluntad anticipada no se busca que el paciente muera.
De igual manera, mencionó que lo que se busca con la Ley de Voluntad Anticipada es que se garantice y respeta la decisión de toda persona que se encuentre en un estado de salud que sea irreversible, de manera que se evite que se prolongue su sufrimiento de manera artificial, y que siempre tengan acceso a cuidados paliativos.

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También señaló que la iniciativa promovida se sustenta con criterios internacionales y nacionales sobre bioética y derechos humanos, indicando a algunos de estos como la Declaración Universal de Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, y la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores; las cuales reconocen el derecho a la salud, a la dignidad y a decidir sobre el final de la vida.
Finalmente, el legislador Alday Nieto reiteró que “la vida debe vivirse con dignidad, pero también debemos reconocer que el derecho a morir sin dolor y en paz forman parte de esa dignidad. Negar esta posibilidad es negar un derecho humano básico”.