Roldán Peniche Barrera
Yucatán Insólito
Según el DRAE el verbo “peluquear” (en vez de “pelar” o “”pelarse”) es americano:
PELUQUEAR v. tr. prnl. Amér. Merid. C. Rica y Méx. Cortar o arreglar el cabello a una persona.
Santamaría prefiere emplear “peluquearse” a “peluquear” y dice:
Peluquearse. pr. Cortarse el pelo, hacer uno que se lo corten; hacerse el pelo; pelarse. Desde que los barberos ya no son más que peluqueros, uno no hace más que peluquearse.
Ningún otro diccionario recoge tal verbo. Sin embargo, en Yucatán es muy usado por ir al peluquero.
Veamos un ejemplo:
En la feria de Santiago conversan mientras comen nance, Elmerón y el abogao:
-¿Qué vas a hacer, Elmerón? Te veo tenso -dice el abogao.
-Me voy a “peluquear”.
-¡Oye, muy buena idea! Ya te pareces al león del Centenario.
-No es para tanto, abogao, pero ya hace seis meses que no voy al “rapabarbas” y ya hasta el “Calabazo” me dice y repite que me parezco, no a un león, sino a un Chico Ché o a Salinas de Gortari.
-¡Oye, cabresto, si a ese desgraciao no le crece el pelo! -replica el abogao engallado.
-No; si le crece, abogao, pero no se ve: le crece hacia adentro de la “azotea”, por eso dice tantas mamadas -responde Elmerón riendo a mandíbula batiente.