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No tomes todo tan

en serio

Una de las recomendaciones para tener una empresa saludable, contando con colaboradores saludables (tanto mental como físicamente), es no tomarse todo tan en serio. No tomarse todo en la vida, como si fuera un conjunto de estrictas reglas a seguir. Las personas, muchas veces sucumben ante los paradigmas de la sociedad y se ven auto obligados a cumplir con cuadriculadas normas. Difícilmente nos detenemos por un momento a reírnos de nosotros mismos, a disfrutar de la vida a pesar de nuestros errores y a saber con certeza que somos valiosos seres humanos. Con montones de virtudes y cualidades… pero al fin humanos.

Cuando nos preocupamos mucho por las cosas, solemos estresarnos. En ocasiones, vivimos llenos de problemas que nosotros mismos hemos creado. Las personas no se imaginan cuántos dolores de cabeza pueden evitarse con sólo cambiar sus enfoques de vida. Lo que ocurre con tomarse la vida en serio, es que las personas creen que con esto, estarán satisfaciendo una necesidad de la sociedad, estarán dejando en alto su reputación y obtendrán respeto de los demás.

Sin embargo, en el largo plazo, vale mucho más invertir en uno mismo que en otras personas. Finalmente, lo que diga la sociedad es el resultado de las acciones masivas inconscientes… y por lo regular, todo lo inconsciente tiene algo de negativo.

Es bien sabido que los paradigmas destruyen a la sociedad, dado que le abre las puertas a vivir sin pensar. Cuando aceptamos un paradigma inconscientemente, estamos renunciando a tomar nuestras propias decisiones.

Somos nosotros mismos quienes tenemos el control de nuestras vidas, pero en ocasiones queremos (por miedo) que otros lo tengan y lo manejen bien. Tengo casos de personas que me han contado, que leen mi blog y que intentan llevar a cabo todo lo que se explica en estos artículos… pero en ocasiones fallan y se deprimen.

¡Ese es el error! No deberías deprimirte por no lograr algo, finalmente si lo intentaste, y pusiste de tu corazón y alma para alcanzarlo, pero finalmente tu fuerza no fue suficiente, ¿qué más da?

Una posibilidad es que lo vuelvas a intentar con una diferente aproximación, y la otra es que simplemente te relajes. Hay cosas que simplemente no son para uno, y querer vivir una vida ideal por lo regular no es una buena idea.

Yo prefiero mil veces poderme reír con mis amigos y familiares de mí mismo porque aún soy un despistado que no recuerda dónde tiene el teléfono cuando lo tiene en la mano y no estar pensando que mi memoria va a fallar o que tendré que tomar medicamentos desde ya.

La vida es para gozarla, es para disfrutarla, en este mundo tenemos montones de maravillas por aprovechar y nuestra misión es ser felices. ¿Para qué preocuparse tanto? ¿Por qué más bien no nos enfocamos en las cosas buenas?

Si cometes un error grave… ¡Aprendiste! ¿Qué podría ser mejor? Ahora cuentas con una mayor autoridad para tomar decisiones en el futuro, sin contar con el hecho de que has crecido, has mejorado y has adquirido experiencia.

El poder de vivir una vida tranquila, independientemente de las situaciones, te ayudará a tener una gran claridad en tus deseos y a poderte visualizar siendo exitoso. Las personas que fracasan, usualmente viven más estresadas y preocupadas todo el tiempo. No porque las cosas les salga mal, es que se estresan… es porque se estresan, que todo les sale mal.

Juan Sebastián

Celis Amaya

CONTACTO: Para atención directa, acuda al Hospital Psiquiátrico “Yucatán”. Con referencia médica para la atención al suicidio; en los momentos de desesperanza, contactar al Programa Integral de Atención al Suicidio (PIAS) del Hospital Psiquiátrico, Tel. 6 11 01 94, de lunes a viernes en horario de oficina. Estamos también en Radio Universidad 103.9 FM, todos los jueves a la 1 p.m., con repetición los domingos a las 4 p.m. Contacte también a los siguientes correos: programapias@yahoo.com y programapias@hotmail.com, En Facebook, “Grupo La Esperanza PIAS”.

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