La rendición de cuentas del Ayuntamiento de Valladolid entró en un terreno de controversia luego de que, en sesión de Cabildo celebrada el pasado 25 de agosto, la mayoría de los regidores decidió no aprobar la cuenta pública presentada por el alcalde Homero Novelo Burgos.
La reunión se llevó a cabo a las 10 de la mañana y tuvo como punto principal la votación de los informes financieros del municipio. El resultado fue adverso para el edil: seis votos en contra.
La negativa no provino solo de las bancadas opositoras. Si bien los regidores Antonio Díaz Aguilar y Orlando Rejón Rosado, de Nueva Alianza, junto con las panistas Floricelly Osorio Aguilar y Trinidad Batún, manifestaron su rechazo, también lo hicieron las regidoras de Morena Gloria Castro Santoyo y Rosana Mena, quienes coincidieron en que el documento carecía de claridad sobre el uso de los recursos.
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De acuerdo con los regidores, el informe no detalla cómo se han aplicado los presupuestos ni en qué proyectos se han invertido. Señalaron que el manejo financiero del actual gobierno municipal genera dudas y no cumple con los principios de transparencia que debe garantizar la administración pública.
Al no obtener la aprobación, el Alcalde convocó inmediatamente a una sesión extraordinaria con el argumento de que tenía derecho a que se analizaran los motivos del rechazo. Sin embargo, los regidores cuestionaron la validez de ese llamado, al considerar que la sesión ya había concluido y que cualquier intento por repetir la votación carece de fundamento legal.
La situación refleja un punto crítico en el funcionamiento del Cabildo vallisoletano. La falta de respaldo incluso por parte de regidores del mismo partido del alcalde evidencia que la preocupación por la transparencia financiera trasciende la división partidista.
Los representantes municipales insistieron en que no darán su aprobación mientras no exista información puntual y verificable que explique en qué se gastan los recursos del Ayuntamiento. Afirmaron que su deber es con la ciudadanía y que no avalarán manejos poco claros que puedan repercutir en la confianza de la población hacia el gobierno local.
El rechazo a la cuenta pública de Homero Novelo Burgos representa un hecho inusual en la política municipal, donde por lo general los alcaldes cuentan con el respaldo de sus correligionarios. En este caso, el voto en contra de regidoras de Morena marcó un precedente que podría tener implicaciones políticas y administrativas en los próximos meses.
La exigencia de transparencia y rendición de cuentas se mantiene como la principal demanda en Valladolid, en un contexto donde la ciudadanía pide mayor certeza sobre el destino del presupuesto público. Por lo pronto, las cuentas del Ayuntamiento siguen en entredicho, a la espera de que se presenten documentos que aclaren el uso de los recursos.
