El conductor de un Hyundai que huía de la policía, debido al exceso de velocidad para tratar de escapar perdió el control del automóvil, se subió a la banqueta, tiró una palmera y una mata de henequén, y con la parte trasera derribó parte de la albarrada de un predio de Santa Gertrudis Copó, donde terminó la carrera y fue detenido por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública.
Según información recabada en el lugar del hecho, el automóvil, tipo i10, de color blanco, sin placas, transitaba por la lateral del arroyo exterior del Anillo Periférico seguido de cerca por una patrulla de la SSP.
El conductor, para tratar de escapar de los policías, dobló en la calle 14 de Santa Gertrudis Copó, avanzó dos esquinas y al dar vuelta en la calle 7-B, perdió el control del vehículo debido al exceso de velocidad con el que transitaba, se subió a la banqueta, tiró una palmera, una mata de henequén y con la parte trasera derribó parte de la albarrada del predio número 325.
El conductor salió del auto por sus propios medios y trató de escapar, pero de inmediato fue sometido y detenido por los policías.
Una vecina del predio aledaño al que el Hyudai le derribó parte de la albarrada manifestó que escuchó el estruendo del choque y de inmediato salió a ver qué había pasado, y se encontró a las puertas de su domicilio con un policía que estaba sometiendo al conductor del automóvil.
La versión de la testigo confirmó que dada la prontitud con que aparecieron los policías, la explicación es que el sujeto era perseguido; posteriormente lo subieron a la patrulla y se lo llevaron.
Cabe señalar que cuando se trata de un hecho de tránsito, los uniformados aseguran el vehículo, acordonan el área y esperan la llegada de los peritos y de los representantes de las compañías de seguros, en caso de ser necesario.
En el caso que nos ocupa, los agentes Cahum y Uh, quienes arribaron en la patrulla 6569 de la SSP, sacaron sendos machetes, con los que cortaron las pencas del henequén que derribó el automóvil, que estorbaban, para que posteriormente el operador de la grúa 936 de dicha corporación retirara el vehículo.
Al sitio acudió la Comisaria Municipal de Santa Gertrudis Copó, quien trató de dialogar con los policías respecto al suceso y mencionó algo de drogas, pero los uniformados guardaron silencio.
Versión de los testigos
De acuerdo con datos obtenidos entre testigos y personas en el lugar de los hechos, trascendió que el conductor de un vehículo Grand i10 de color blanco entró como “alma que persigue el Diablo” a la comisaría de Santa Gertrudis Copó, luego de haber estado circulando sobre el Periférico, perseguido por varias unidades policíacas que lo siguieron hasta la citada comisaría meridana.
El alocado guiador entró sobre la calle 14, pero al llegar al cruce con la 7 giró a la derecha, pero como circulaba con exceso de velocidad tratando de huir de la policía, perdió el control y se estrelló contra una albarrada de un predio.
El alocado guiador bajó por cuenta propia del vehículo y arrojó un maletín de color negro, supuestamente donde tenía diversas cantidades de droga.
El sujeto trató de huir, pero fue detenido en el sitio por varios policías, que luego de esposarlo lo subieron a una patrulla junto con una bolsa de color rojo, donde supuestamente tenía más sustancias prohibidas.
Los mismos policías retiraron las placas del vehículo y señalaron que el conductor había ocasionado un accidente y que estaba huyendo de la escena del hecho vial, por lo que fue perseguido hasta que lo detuvieron.
Sin embargo, el auto no presentaba más golpe que el que se dio contra la albarrada. La acción policiaca tomó de sorpresa a la gente de la comisaría.
(Fernando Poó / Luis Tamayo / Darvin Canché)