
Vecinos de la colonia Esperanza señalaron que los robos se han vuelto cada vez más frecuentes. En días recientes, un comercio fue víctima de un robo, y la escuela de agroecología ha sufrido pérdidas en menos de un mes, ya que los delincuentes se llevaron de todo.
Adelfo Pinzón Canul, promotor de la escuela de agricultura ecológica Yiits Ka’an, informó que hace unas semanas los ladrones se llevaron herramientas de la subsede ubicada en la unidad citrícola Jool Luum, en la misma colonia, y que recientemente regresaron para sustraer tambores, fertilizantes orgánicos y el resto del equipo, dejando el local completamente vacío. Esta situación ha generado alerta entre los socios del complejo, especialmente porque también se han reportado incendios en viviendas cercanas.
Los alumnos de esta escuela expresaron su preocupación por la inseguridad, ya que están por reiniciar actividades, pero carecen de las herramientas necesarias debido a los robos.
Además, esta situación no sólo ha ocurrido en la institución y establecimientos, sino también en viviendas ubicadas en zonas céntricas y en varias colonias, donde la inseguridad persiste. En la Trinidad y Esperanza, vecinos han manifestado que los ladrones ingresan a casas y terrenos en ausencia de los propietarios, llevándose herramientas y otros objetos.
Adelfo Pinzón reiteró que los amantes de lo ajeno han desmantelado repetidamente la escuela, robando herramientas, botes para abono y otros artículos, lo que dificulta el trabajo y la continuidad de las actividades.

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Vecinos de la colonia Trinidad indicaron que se organizarán este mes para cuidar sus bienes y ayudar a identificar a los responsables, ya que sospechan que se trata de un grupo dedicado a estos robos.
Por su parte, residentes de la colonia San Fernando, como Luis Chi, señalaron que la inseguridad es alta, ya que los ladrones frecuentemente ingresan a viviendas y terrenos para sustraer herramientas, sembrados, maderas e incluso puertas y ventanas, que son arrancadas de las casas. En ausencia de los propietarios, los delincuentes aprovechan para brincar bardas y robar lo que encuentran a su paso.
Por ello, los habitantes hicieron un llamado urgente para que se incremente la vigilancia policial en la zona y así proteger a la comunidad.