ESCARCEGA, Cam., 1 de julio.- El agente municipal del ejido Miguel Hidalgo –mejor conocido como “El Caracol”-, Luis Norberto Cortés Brown, y uno de sus supuestos policías comunitarios, no conforme con usurpar funciones de agentes de Vialidad al querer “infraccionar” con 250 pesos al ciudadano Marcos Sánchez Vargas, lo golpearon a él y a su esposa, y en el colmo del cinismo, hasta demandaron al agraviado por supuestas amenazas.
Así lo denunció ayer la ciudadana Reina Sánchez Cortés, quien aseguró que las agresiones de las que fueron víctima ella y su esposo Marcos Sánchez Vargas, ocurrieron el sábado, cuando ambos retornaban de la localidad de Matamoros, a la que acudieron a buscar a su hijo, a bordo de una camioneta Nissan, propiedad de su cónyuge.
Narró que al llegar al ejido por el camino estatal que lo enlaza con la carretera federal Escárcega-Chetumal, se encaminaron hacia la Conasupo a comprar unas cosas, pero al salir se toparon con que el agente municipal, Luis Norberto Cortés Brown, lo esperaba justo en medio de la calle y le dijo que como venía a exceso de velocidad por el camino tenía que pagar una multa de 250 pesos.
Su esposo se quedó sorprendido, por lo que escuchó y trató de ignorarlo, pero el agente municipal insistió en que “él era la autoridad” y tenía que pagar esa multa, a pesar de que nadie lo erigió como policía de tránsito, ni como agente de Vialidad, aunado a que le indicó que jamás entró a la velocidad que él indicaba.
En esas estaban, cuando intempestivamente, tanto ella como su esposo, fueron empujados y arrojados al suelo, en una cobarde agresión, por un sujeto que supuestamente se desempeña como policía comunitario o algo por el estilo; resultando ella con lesiones en un pie, con la rodilla y la columna lastimadas, porque cuando los empujó y agredió físicamente estaban descuidados.
“No esperábamos la agresión, ni que lo hicieran de esa manera tan vil y cobarde, ya que después de lo que hizo el supuesto policía del agente municipal, se escondió en la Conasupo y se negó a salir a enfrentar a mi esposo, quien le dijo que si tenía suficientes pantalones como los tuvo para agredir a una mujer, que saliera a hacerle frente, pero no lo hizo”, detalló.
Al parecer, por encararlos de esa manera, alguno de los dos, bien sea el agente municipal o su supuesto policía, en el colmo de las cosas, los están requiriendo para el próximo día 4 de julio a la Unidad de Justicia Penal Alternativa de la Vicefiscalía General Regional, porque éste supuestamente los amenazó, cuando la realidad es otra, cuando los agresores fueron ellos.
La mujer dijo que tanto ella como su esposo pensaban dejar las cosas así, pero ante la actitud cobarde con la que están actuando van a contrademandar por el delito de lesiones calificadas, además de pedir que se inicie una averiguación del porqué están usurpando funciones de un agente de Vialidad, y exigir que les compruebe el agente municipal que iban a exceso de velocidad, ante las autoridades ministeriales.
(Texto y fotos: Martín Contreras)