El comercio de tortilla a domicilio, producto de primera necesidad, es en este momento de crisis sanitaria uno de los más rentables negocios, razón por la que este miércoles salió a flote la existencia de una “mafia tortillera”, que pretende el monopolio de dicha actividad y que estaría respaldada por el alcalde Eliseo Fernández Montufar, lo que derivó en un enfrentamiento entre los mototortilleros con saldo de varios heridos y detenidos.
El mantenerse en casa o aislamiento social es la recomendación principal de las autoridades sanitarias para evitar una propagación exponencial del virus del COVID-19, razón por la que la venta de tortilla a domicilio ha tomado especial relevancia en las últimas semanas.
De pronto, los vilipendiados “mototortilleros”, a quienes se les acusa de violar las normas de tránsito y no dar completo el kilogramo de tortilla, comenzaron a cumplir una función importante durante la actual pandemia de coronavirus.
Aunque el precio de la tortilla es de 16 pesos, la gente no ha dudado en pagarla a 18 y hasta en 20 pesos, con tal de evitarse la fatiga de ir a los puntos de venta, además de que muchos de estos comerciantes ambulantes del básico incluso ofrecen su producto a crédito.
Ahora la tortilla es “oro puro”, esta situación revivió el enfrentamiento entre los tortilleros libres y el grupo que controla un individuo al que se le conoce con el nombre de “Salvador” y que fue uno de los principales activistas del panista Eliseo Fernández Montúfar durante la campaña política que lo llevó a la alcaldía de Campeche.
Salvador J. es quien controla la entrega de tortilla en la capital del Estado de Campeche, al estilo de la mafia siciliana, y controla una flotilla de más de 150 motortilleros, actividad por la que diariamente logra ingresos substanciales, calculados en varios miles de pesos.
La razón del conflicto
Aprovechando la crisis del COVID-19 y el respaldo del presidente municipal, Salvador J. pretende monopolizar totalmente la entrega de tortilla a domicilio, es decir que no circule ningún mototortillero autorizado por él, por lo que desde hace algunos días lanzó una advertencia a los mototortilleros libres para que se adhirieran a su grupo. El era la única persona que cuenta con la autorización del Ayuntamiento para expender el básico en forma ambulante.
El grupo de Salvador J. es el que vende la tortilla más cara, mientras que los mototortilleros libres, padres de familia que adquirieron una motocicleta y una nevera, para poder dedicarse a la venta del básico, se negaron a unirse a la “mafia tortillera”, lo que no le agradó al líder del grupo y provocó el enfrentamiento violento para sacar del trabajo al grupo contrario.
El enfrentamiento violento entre tortilleros tuvo lugar este miércoles en la Calle Exhacienda Kalá, cuando Salvador J. y un grupo de golpeadores intentaron “ajusticiar” a tortilleros disidentes.
El zafarrancho dejó un saldo de siete personas detenidas y otros tres con lesionados menores. Todo parece indicar que lo que intentaron los seguidores del monopolizador de la entrega de tortilla a domicilio era “ajusticiar” a uno de sus contrincantes para darle una lección. Supuestamente lo habían golpeado en la colonia Minas y luego lo persiguieron por las colonias 20 de Noviembre y Exhacienda Kalá, en donde vive el agredido.
Garrotes, machetes y cuchillos en el frentamiento
Los “golpeadores” de Salvador J., que estaban en plena persecución para terminar con uno de los mototortilleros libres, eran esperados por más mototortilleros contrarios armados con garrotes, cuchillos y machetes e inició la batalla campal.
El dirigente de los mototortilleros se transportaba a bordo de un vehículo Attitude, color blanco, en la que transportaba a seis personas, quienes también portaban armas blancas y quienes se sumaron a la agresión, por lo que vecinos reportaron los hechos al número de emergencia.
Tras el reporte, acudieron al lugar varias patrulla de la Policía Preventiva y elementos motorizados, quienes aseguraron el vehículo de Salvador J. y los rijosos, e incluso uno de los policías tuvo que accionar su arma con disparo al aire, para tomar el control de la situación y proceder a la detención.
Aunque existe la versión de que el policía accionó su arma, debido a que uno de los agresores se le abalanzó y lo intentó agredir con un arma blanca, cuando otros gendarmes estaban en la tarea de someter a uno de los agresores.
Durante la reyerta, por lo menos tres individuos resultaron lesionados con arma blanca, así como como golpes contusos, además de que los policías tuvieron que hacer uso de la fuerza para “tranquilizar” a uno de los mototortilleros.
Algunos de los rijosos intentaron huir a bordo del auto Dodge Attitude, color blanco, tomando la carretera antigua a Mérida, mismo que fue asegurado sobre la Periférico “Pablo García y Montilla” por los encargados del retén ubicado sobre la carretera a Castamay.
A estos individuos se les encontró en su poder algunos machetes y garrotes, mientras uno de los lesionados acudió a la Fiscalía General del Estado de Campeche (FGECam) a interpone una denuncia por el delito de lesiones.
Uno de los hermanos del agredido y “secuestrado” por la “mafia tortillera” declaró que esto está ocurriendo debido a que Salvador J., sabiéndose protegido por el alcalde de Campeche, Fernández Montúfar, pretende el control total de la entrega de tortilla a domicilio, negocio en el que se manejan mensualmente varios millones de pesos.
(POR ESTO! Campeche)