Un total de 241 niñas y niños en el Estado contrajeron Coxsackie este 2025, mejor conocida como la Enfermedad de Manos, Pies y Boca (EMPB), comúnmente adquirida en guarderías y escuelas. Se presenta con síntomas como fiebre breve y erupciones papulovesiculares en las palmas de las manos y las plantas de los pies, con o sin úlceras bucales dolorosas, y no existe tratamiento, aunque remite en pocos días.
De acuerdo con la Secretaría de Salud (SSA) de la Entidad, los casos registrados este año se concentraron principalmente en los municipios de Campeche, Carmen y Escárcega, considerados de alta relevancia por su densidad poblacional.
Josefa Castillo Avendaño, titular de la dependencia, informó que actualmente no se tiene registro de nuevos contagios, ya que el brote correspondió a la temporada que recientemente concluyó, lo que permitió una intervención oportuna y el control de la propagación del virus.
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La SSA precisó que, en comparación con el 2024, este año no se presentó un incremento en los casos de la Enfermedad de Manos, Pies y Boca; por el contrario, la cifra fue ligeramente menor. No obstante, se le dio mayor énfasis a la difusión de información preventiva, lo que permitió que madres y padres de familia estuvieran alertas y acudieran de manera temprana a los servicios médicos, facilitando el diagnóstico y la atención adecuada de los menores afectados.
La autoridad de salud reiteró que la EMPB es una infección viral común a nivel mundial, que afecta principalmente a bebés y niños, aunque también puede presentarse en adolescentes y, de manera ocasional, en adultos. En la mayoría de los casos es leve y se resuelve de forma espontánea.
El virus se encuentra en secreciones nasales, saliva, mucosidad y en el líquido de las ampollas, y se propaga a través de la tos, estornudos, contacto directo, heces y objetos contaminados como juguetes o utensilios. Por ello, la SSA enfatizó la importancia de las medidas preventivas como el lavado frecuente de manos, el uso de cubrebocas ante síntomas respiratorios, evitar compartir alimentos y utensilios, desinfectar objetos de uso común y aislar a los menores cuando presenten síntomas.
Finalmente, se recordó a la población que no existe un tratamiento específico para esta enfermedad y que, al tratarse de un virus, no debe ser tratada con antibióticos. Se recomienda mantener una adecuada hidratación, evitar bebidas ácidas en caso de úlceras bucales y acudir a la Unidad de Medicina Familiar correspondiente para recibir atención médica y tratamiento que ayude a aliviar la fiebre y el malestar general.