
La entrada a Sabancuy, en concreto la parte de la carretera hacia Chekubul, carece de reductores de velocidad y señalamientos viales, lo que implica que los vehículos circulen a exceso de velocidad y exista el riesgo de atropellamientos.
René Fernández Cortés, vecino de la colonia Centro, señaló que es urgente instalar topes para que los conductores aminoren la marcha. Recordó que hace dos años existían estos dispositivos, pero con el tiempo fueron destruidos o retirados.
Una de las vías más peligrosas es la calle Iturbide, por donde transitan peatones constantemente y donde los automóviles pasan sin frenar.
Desde hace años, los habitantes solicitan la colocación de "lomos de burro" y señalamientos preventivos, a fin de evitar accidentes o incluso pérdidas humanas.
Durante el periodo vacacional, el flujo vehicular ha incrementado, lo que vuelve más evidente la necesidad de medidas de control vial en esta zona.
Por su parte, Leonor Trujillo Santos, de la colonia La Lupita, subrayó que Sabancuy ha crecido, al igual que el tránsito vehicular, incluyendo vehículos pesados, lo cual representa un riesgo adicional si no se colocan reductores de velocidad.
Pidió a las autoridades municipales que atiendan esta necesidad y prioricen la seguridad vial en las calles principales y en la entrada al poblado.