
En el único cementerio de la ciudad de Hopelchén y en sus tres primeras secciones existen alrededor de 35 bóvedas o tumbas en completo abandono, unas al descubierto y otras con agua, mismas que generan la proliferación de mosquitos, convirtiéndose en un foco de infección.
En un recorrido realizado este sábado se pudo apreciar que hay tumbas al descubierto que por años no han sido atendidas por los deudos. En la primera sección hay 15 sepulcros abandonados, otros 10 en la segunda, cinco en la tercera y un número similar en la cuarta parte, espacios que por años no han recibido mantenimiento por parte de familiares de los difuntos.
Cecilio Cauich May, Juana Cauich y Etelvina Caamal Puc, vecinos de El Poste y de la cabecera municipal, coincidieron en que el Ayuntamiento debe expropiar los terrenos de las bóvedas abandonadas y venderlos, para acabar con el problema de tumbas en abandono.
Relataron que la autoridad renta gavetas en la última sección porque ya no hay espacio en las primeras, pero hasta ahora no se ha planteado la expropiación de los terrenos abandonados.