Por representar riesgo de colapso, la dirección de Protección Civil determinó que era urgente el desmantelamiento del puente peatonal de la colonia Pedro Sainz de Baranda, trabajos que fueron otorgados a una chatarrera particular quien durante dos semanas aproximadamente deberá retirar los materiales en una estrategia que será monitoreada por personal de la dependencia y de la Policía Municipal para evitar riesgos a los miles de vehículos que transitan por este tramo de la carretera federal 180.
Ante el escrutinio público de que ese puente peatonal no debería ser retirado pues era propiedad de Walmart, quien hace 14 años lo donó a Ciudad del Carmen, a través de un comunicado el Ayuntamiento confirmó que la estructura no era municipal, sin embargo, la donación no derivaba de recursos públicos municipales, estatales ni federales y que tras una revisión técnica, se determinó que había dejado de cumplir su vida útil, presentando deterioro que ponía en peligro a peatones y automovilistas.
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Al respecto, Julio César Villanueva Peña, director de Protección Civil, dijo que para evitar erogar recursos públicos en este proceso, se llegó a un acuerdo con un particular para que realizara el desmontaje sin cobrar por la mano de obra, a cambio de quedarse con el material de desecho (chatarra).
“Tras diversos análisis se determinó que el puente ya no cumplía su función y presentaba un alto nivel de corrosión en los barandales, lo que lo hacía peligroso, ya hubo accidentes en ese sector, desde choques a las bases y la más reciente muerte de un hombre, el puente no es funcional y representa un riesgo visible, por eso se tomó la determinación de retirarlo en cumplimiento de la Ley de Protección Civil”, señaló.
Sobre los trabajos, indicó que se llevan a cabo de manera supervisada por personal de Protección Civil para garantizar que las maniobras no pongan en riesgo a peatones ni conductores. “Se está retirando por partes para minimizar afectaciones en la vialidad; sin embargo, en momentos críticos sí se prevé cerrar carriles de la avenida Isla de Tris”, explicó, al referir que el proceso podría extenderse al menos dos semanas, dado que algunas piezas estructurales requieren mayor cuidado para su retiro.
Villanueva Peña reconoció que existe demanda ciudadana de un cruce seguro en la zona de la colonia 23 de Julio, donde los peatones arriesgan su vida al atravesar la vialidad, por lo que el Ayuntamiento analiza la colocación de reductores de velocidad y la posibilidad de instalar una nueva estructura, priorizando la seguridad de los transeúntes.
