CIUDAD DE MEXICO, 13 de marzo (NTX).- Un error del portero Miguel Jiménez abrió la puerta del triunfo de América, que se impuso 2-0 al Guadalajara para clasificar a semifinales de la Copa MX Clausura 2019 en una edición más del clásico nacional.
Ante una gran entrada de más de 56 mil espectadores en el Estadio Azteca, el paraguayo Bruno Valdez al minuto 59 y el colombiano Nicolás Benedetti al 91 lograron las anotaciones del triunfo para las Aguilas, que enfrentarán en semifinales a Xolos de Tijuana.
Pasada la media hora de juego llegó el primer disparo del cuadro tapatío, de Dieter Villalpando, que desvío Bruno Valdez, lo que hizo despertar a la afición con el grito de “Chivas, Chivas”, aunque el dominio siguió siendo azulcrema pero no supieron aprovecharlo.
Los pupilos de Miguel Herrera mantuvieron el control del esférico en el inicio del complemento y crearon las llegadas de mayor peligro, aunque la definición les impedía abrir el marcador hasta que llegó el error de Jiménez.
El portero de Chivas salió mal en un tiro de esquina y eso lo aprovechó Bruno Valdez, quien dentro del área chica empujó el esférico para poner en ventaja a los de casa.
Ya con Alan Pulido e Isaac Brizuela en la cancha, los del “rebaño sagrado” intentaron igualar el marcador y obligar a los penales, pero no pudieron llegar con real peligro a la meta de Marchesín quien estuvo atento cuando fue requerido.
Los intentos de Chivas no fueron tan peligrosos pese a la lucha que ofrecieron y al apoyo de su gente, mientras que América sentenció ya en la compensación por conducto de Benedetti tras un contragolpe letal.
El árbitro del encuentro fue Francisco Chacón, quien tuvo una regular actuación.
Violencia en el Azteca
Como siempre, cuando uno sale derrotado y esto se combina con el alcohol todo se rompe.
Acabó el juego entre América y Guadalajara, en los cuartos de final de la Copa MX y los ánimos se calentaron, de los gritos pasaron a los insultos, de los insultos a los empujones y de ahí a los golpes.
Los de Chivas no se aguantaron las burlas de los del América y el alboroto inició tanto que hasta la seguridad del estadio intervino.
Al final nada pasó a mayores y el conato iniciado por dos mujeres por cierto, se apagó.