El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, lanzó una advertencia contundente ante la posibilidad de una intervención armada de Estados Unidos en Venezuela, al señalar que un escenario de ese tipo podría derivar en una catástrofe humanitaria de grandes dimensiones.
El posicionamiento del mandatario brasileño se dio en un contexto de creciente tensión regional, marcado por la presión política y militar de Washington sobre el gobierno de Nicolás Maduro.
Durante su participación en la cumbre del Mercosur, Lula da Silva subrayó que América Latina debe mantenerse como una zona de paz, libre de conflictos armados impulsados por potencias extranjeras.
En ese sentido, afirmó que la región no puede aceptar la presencia militar de actores externos en territorio sudamericano, ya que ello pondría en riesgo la estabilidad política, social y humanitaria del continente.
América Latina, una región que debe mantenerse en paz
El jefe del Estado brasileño sostuvo que una intervención militar en Venezuela no solo afectaría a ese país, sino que tendría consecuencias regionales, incluyendo desplazamientos masivos de población, colapso de servicios básicos y un aumento en la crisis migratoria.
A su juicio, este tipo de acciones ponen a prueba los límites del derecho internacional y debilitan los mecanismos diplomáticos para la resolución de conflictos.
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Lula da Silva recordó que, en días recientes, ya había advertido sobre la necesidad de analizar los verdaderos intereses detrás de la presencia militar estadounidense en el Caribe y de las amenazas de posibles ataques terrestres en territorio venezolano. Para el presidente brasileño, cualquier escalada bélica tendría un impacto directo en la población civil, profundizando las dificultades económicas y sociales que ya enfrenta Venezuela.
Lula se ofrece como mediador entre Washington y Caracas
Ante este escenario, el mandatario brasileño reiteró su disposición a actuar como mediador entre Donald Trump, presidente de Estados Unidos, y Nicolás Maduro, con el objetivo de evitar un enfrentamiento armado. Lula señaló que su prioridad es impulsar una salida diplomática, que permita reducir tensiones y abrir canales de diálogo entre ambas partes.
El presidente de Brasil reveló que contempla retomar conversaciones con Trump antes de las festividades decembrinas, con la intención de explorar cómo su país podría contribuir a un acuerdo político que evite lo que calificó como una “guerra fratricida” en la región.
Asimismo, indicó que ya ha dialogado con Maduro para conocer los temas abordados en la llamada telefónica que el mandatario venezolano sostuvo recientemente con su homólogo estadounidense.
Para Lula da Silva, la diplomacia sigue siendo la vía más efectiva para preservar la estabilidad regional y evitar una crisis humanitaria que tendría repercusiones más allá de las fronteras venezolanas.
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