
En el marco del Centenario de la fundación del Banco de México (Banxico), la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo encabezó un discurso en el que reconoció el papel de la institución como garante de estabilidad y soberanía económica, pero también lanzó una serie de retos estratégicos para el banco central, el gobierno y la banca mexicana.
El evento, realizado este lunes 25 de agosto en la Ciudad de México, reunió a representantes de Banxico, de la Secretaría de Hacienda, de la banca privada y de la banca de desarrollo.
Banxico, pilar de estabilidad y protección social
La mandataria destacó que a lo largo de 100 años Banxico ha enfrentado crisis internacionales y transformaciones económicas, manteniendo la estabilidad de precios y protegiendo a las familias de los efectos de la inflación.
“Controlar la inflación no es solo una tarea técnica, es un acto profundamente social, porque quienes más sufren son los hogares de menores ingresos”, afirmó Sheinbaum.
Resaltó que gracias a la coordinación entre Banxico, Hacienda y la banca, México mantiene un sistema financiero sólido, finanzas públicas responsables y una moneda fuerte.

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Crédito accesible y fortalecimiento del mercado interno
Uno de los principales retos señalados por Sheinbaum es ampliar el acceso al crédito, ya que México es uno de los países con menor financiamiento en relación con su Producto Interno Bruto.
La presidenta subrayó que el financiamiento no debe ser un privilegio, sino un motor para impulsar a pequeñas y medianas empresas, emprendedores y familias trabajadoras.
Asimismo, llamó a complementar la fortaleza exportadora del país con un mercado interno más dinámico, que fomente el consumo, la inversión nacional y la generación de empleos dignos.

Digitalización e inclusión financiera
Otro de los desafíos planteados fue la transformación tecnológica del sistema financiero, con la meta de garantizar que jóvenes, mujeres y sectores históricamente excluidos tengan acceso a servicios bancarios digitales y sistemas de pago modernos.
“El reto es triple: mantener estabilidad e inflación baja, aumentar el financiamiento productivo y apostar por la innovación tecnológica”, puntualizó.
Hacia un México con estabilidad y bienestar
Sheinbaum concluyó su mensaje asegurando que el futuro de Banxico debe enfocarse en consolidar un crecimiento con justicia, donde la estabilidad macroeconómica se traduzca en más bienestar para las familias mexicanas.
“El Banco de México seguirá siendo pilar de nuestra fortaleza económica, pero ahora el compromiso es que esa estabilidad se refleje en más desarrollo y menor desigualdad”, señaló.

Con este discurso, la presidenta proyectó un modelo económico que combine estabilidad, inclusión y digitalización, marcando la ruta para el segundo siglo de vida de Banxico.
IO