Por Francisco Javier Díaz Medina
COZUMEL, 20 de agosto.- Gran hermetismo en el extraño robo a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), luego que los apoderados y propia autoridad correspondientes reservan el caso.
A más de 24 horas que se suscitó el robo el pasado lunes en las supuestas tres cajas de los CFEMáticos y dos cajas fuertes, en el interior de las instalaciones de la paraestatal, donde se presume que pudieron haberse llevado importante cantidad de dinero en efectivo, hasta el momento los apoderados de la empresa y autoridades competentes guardan hermetismo en torno al caso.
Como se recordará, y de acuerdo con la publicación en este rotativo, durante las 09:00 horas del pasado lunes 19 del mes en curso, personal de dicha paraestatal descubrieron el robo que fue perpetrado en el lugar, tras haber encontrado rotas las cerraduras de las puertas de acceso y dañadas las cartucheras de los CFEMáticos, y que para ello los ladrones utilizaron mazos y cinceles, además de soplete para abrir las cajas fuertes, y que pudo haber sido importante botín millonario que se llevaron.
Por su parte el comandante de la Policía Ministerial, Armado Pérez Pérez, tras entrevista que concedió, dijo que el personal llegó al lugar para realizar las primeras pesquisas, en coordinación de personal criminalistas, pero sólo se enfocaron al trabajo de campo, y tras las primeras pesquisas indicaron al personal del edificio a efectuar la denuncia correspondiente, ante la Agencia del Ministerio Público Federal, al ser competencia de esa dependencia.
Sin embargo, hasta el momento, ninguna autoridad ha dado información con respecto a las investigaciones, luego que en el exterior de la oficina federal hay algunas cámaras de vigilancia y, sobre todo, que pesquisas se han realizado en contra del personal de vigilancia privada y contratada para el resguardo de la paraestatal.
Además se desconoce si los apoderados del área administrativa, ya hayan realizado un arqueo del monto exacto que fue robado, pues pudo haber sido importante cantidad de dinero o millonaria que se hayan llevado los ladrones.