Un presunto descuido por parte de un custodio de la Policía Estatal Preventiva (PEP), a quien sólo se identificó con las iniciales J.D.S. de 39 años, originó la fuga de un reo del Centro de Reinserción Social (CERESO) de Carmen, quien era atendido en el Hospital General “Doctora María del Socorro Quiroga Aguilar”, lo que desató una intensa movilización por las calles de la ciudad la mañana de ayer.
El prófugo resultó ser un joven de 24 años que había sido detenido por el delito de robo de una motocicleta en la colonia Pedro Sainz de Baranda, estaba llevando a cabo su proceso judicial, pero durante la audiencia reportó sentirse mal, por lo que fue trasladado al Hospital General, donde logró escapar por algunas horas.
Se supo que autoridades ministeriales lo tenían asegurado bajo el nombre de Miguel Joaquín Ortiz García, aunque horas más tarde trascendió que se trataría de un supuesto médico veterinario zootecnista llamado Carlos Cruz García, conocido entre las asociaciones animalistas de la Isla por su labor con estas agrupaciones. Su libertad duró poco más de 6 horas, en las que puso en jaque a las autoridades policíacas estatales y municipales, ya que fue detenido nuevamente en las inmediaciones de la colonia Francisco I. Madero a eso de las 03:20 de la tarde.
El reporte de fuga ocurrió pasadas las 10:15 de la mañana de ayer, cuando el custodio J.D.S. informó vía radio comunicación a la central del 911 que un recluso que se encontraba a punto de ser dado de alta en el Hospital General se le acababa de fugar.
Rápidamente se activó el código rojo en toda la ciudad, ordenando a las unidades que se encontrarán cercanas acudir a las instalaciones del Hospital General para apoyar a los elementos estatales a la búsqueda del recluso.
Los elementos informaron primeramente que el nombre del reo que logró escapar era Miguel Joaquín Ortiz García, de 24 años, originario del Estado de Chiapas, soltero y de oficio enfermero, quien supuestamente desde el 19 de enero del 2020 había sido puesto a disposición del Ministerio Público de la ciudad por el delito de robo de vehículo, según informaron las autoridades.
El protocolo se extendió a toda la Isla pidiendo el apoyo de los elementos de la Guardia Nacional (GN), que apoyó a las fuerzas municipales y estatales en el peinado de las zonas donde pudo haberse desplazado esta persona, ya que entre los rumores que circulaban era que se trataba de un reo de “alta peligrosidad”, e incluso que se encontraba armado, aunque esto no fue confirmado en ningún momento.
El perímetro del Hospital “Quiroga Aguilar” fue peinado por los elementos castrenses, quienes ingresaron al monte y entre la basura del centro médico para verificar que el delincuente fugado no estuviera escondido entre los descuidados patios del nosocomio.
De igual manera, cabe mencionar que al interior del HG se encontraba un segundo reo del CERESO de Carmen, quien no fue identificado, pero fue retirado del centro hospitalario más de una hora después de ocurrida la fuga.
Aseguran a custodio
Mientras el peinado de la zona se iba extendiendo hacia las colonias aledañas, elementos de la Agencia Estatal de investigación (AEI) de la Vicefiscalía Regional de Carmen procedieron a poner bajo aseguramiento al custodio de la PEP que estaba a cargo de la vigilancia del recluso, ya que se le imputó el delito de evasión de reo; cabe señalar que según el Código Penal de la Federación, en su Artículo 150, indica que las penas por facilitar la huida de algún detenido podrían ser de 6 meses a 9 años de prisión en caso de encontrar culpable a alguien del delito antes señalado, mientras que si se trata de un agente policial su condena se multiplicará.
Los elementos de la Policía Municipal y Estatal montaron un operativo por los diversos cruces y calles de la ciudad en búsqueda del reo fugado; sin embargo, con el paso de las horas la incertidumbre creció entre la ciudadanía, mientras que las corporaciones quedaban mal paradas.
Fue hasta pasadas las 03:20 de la tarde cuando una llamada anónima delató que el fugado se encontraba en la calle 1 de Mayo por José María Pino Suárez, en la colonia Francisco I Madero, donde se logró su recaptura seis horas después de que escapó del Hospital General.
La fuerte presencia de los agentes de la Guardia Nacional logró dicha captura en conjunto con agentes de la Policía Municipal y Ministerial, que trasladaron al reo en un fuerte operativo a la Vicefiscalía para su proceso.
Discrepancias
Vale la pena señalar que la frustrada fuga dejó entrever discrepancias entre la versión dada en primera instancia por parte de las autoridades ministeriales, estatales y municipales, incluido el comandante de la Policía Municipal, Carlos Eduardo del Rivero Galán, ya que según las primeras declaraciones se trató de Miguel Joaquín Ortiz García, quien supuestamente había sido detenido desde el pasado 19 de enero por robo de vehículo.
No obstante, por la tarde noche de ayer, versiones apuntaron a que se trató de la misma persona detenida no el 19 de enero, sino el pasado sábado 1 de febrero en la colonia Pedro Sainz, y no por el robo de un automóvil, era una motocicleta la que pretendió sustraer de una vivienda.
Así mismo, generó suspicacias el hecho de que agrupaciones animalistas argumentaron que se trató de una confusión con el veterinario Carlos Cruz García, pero se confirmó que se trata de la misma persona, éste sería su verdadero nombre, mientras que el otro fue el que dio a los efectivos policíacos al momento de ser detenido la primera vez por robo de una moto. Supuestamente, estudiante de la Universidad Autónoma de México (UNAM) y sus especialidades en Ciudad del Carmen.
En lo que va de la administración estatal, este es el segundo caso de una fuga de reos en Ciudad del Carmen, la primera ocasión ocurrió el 26 de junio del 2016, cuando tres reclusos escaparon del interior del Centro de Readaptación Social (CERESO) de la Isla, siendo detenidos 24 horas más tarde ingiriendo bebidas embriagantes en un restaurante de la colonia Manigua.
Este caso de fuga de un reo pone en tela de juicio la capacidad operativa de los cuerpos policiales de la Isla, a cargo de los directores de Seguridad Pública Municipal, Carlos Eduardo del Rivero Galán, y del Comandante José Luis Castañeda Vega, de la Policía Estatal.
(Texto: Ricardo Jiménez /
Fotos: Ricardo Jiménez / Carlos Valdemar)