La ausencia de una disculpa pública por parte del Rector José Antonio Ruz Hernández, como máximo representante de la Universidad Autónoma del Carmen (UNACAR), en torno a los abusos y casos de acoso sexual denunciados por estudiantes de la institución, así como de la insensibilidad para apenas ahora hacer acciones para la defensa de la mujer dentro de la institución, fueron evidentes en la contestación que hizo ayer por la mañana a través de medios oficiales a su servicio.
“La UNACAR no es Ministerio Público”, aseguró el Rector amigo de “Alito”, y con mucho orgullo aseguró que manoseos, acosos en todas sus formas, miradas incómodas, amenazas y condicionamientos de aprobación de materias por parte del personal docente a alumnas solo amerita sanciones administrativas, no más.
Desde la tarde del martes, la UNACAR, mediante sus cuentas de redes sociales, difundió fotografías del Rector en una reunión en la sala de Consejo Universitario con los demás concejales para simular atención al problema. Ruz Hernández instruyó a María Candelaria Figueroa como titular de la Unidad de Igualdad y Género como una simulación más.
¿Y el reglamento del Personal Administrativo?
En esa reunión, en ningún momento fue importante el Reglamento del Personal Administrativo que en el Artículo 142, dice claramente que amerita expulsión cualquier académico que agreda con violencia, solicite gratificaciones y haga actos inmorales que dañen el prestigio de la institución.
Las alumnas que se manifestaron debían estar ahí, en esa reunión, según la idea manipuladora del priísta Ruz Hernández, que en ningún momento mostró real interés en el problema.
Mediante una sobre exposición a medios de comunicación maiceados por él, sus respuestas a la histórica y valiente protesta feminista siempre fueron demeritando y omitiendo el llamado de las mujeres.
En esquivo discurso que repitió en por lo menos tres entrevistas hasta ayer, Ruz Hernández nunca ofreció disculpas, no explicó tampoco si concedería o no la audiencia en los términos -en una audicioncita abierta a los medios de comunicación y trasmitida en vivo por redes sociales el día 17 de marzo- que solicitaron las alumnas de los colectivos de la defensa femenina en su justa protesta al mediodía del martes en el Aula Magna.
Eso sí, Ruz Hernández aclaró en varias ocasiones que están esperando que alguna alumna se exponga a denunciar con su nombre para “tomarla en cuenta”, tenerla bien registrada y ubicada para después proceder en contra del agresor, pero administrativamente, una amonestación, unos días de descuento y que siga al frente de un aula donde puede acosar a más alumnas, porque la UNACAR no es Ministerio Público.
(Texto y fotos: Agustín Ferrer)