Celex Castro Olivares viajó a Japón acompañado de grandes boxeadores mexicanos para entrenar en el mítico gimnasio Teiken Gim, con el objetivo de apoyar en los entrenamientos de la nueva joya del boxeo, el japonés Tenshin Nasukawa.
Ante ello, los gladiadores mexicanos viajaron al lejano oriente, en el que se destaca Castro Olivares, la joya del boxeo cancunense, quien se mantiene con 21 victorias profesionales y 15 nocauts.
La comitiva de pugilistas está integrada por Celex, César Baca, Ángel Patrón y Arturo Popoca Cárdenas, quienes viajaron a la tierra del sol naciente con la misión de apoyar en la preparación de la nueva joya japonesa: Tenshin Nasukawa.
Por lo que su centro de entrenamiento será el mítico gimnasio Teiken Gim, en el que entrenaron las leyendas, el “Monstruo” Naoya Inoue, el campeón Kenshiro Teraji, Reo Saito o Junto Nakatani.
Como se recordará, el ex “Satán” Castro se mantiene invicto al derrotar por decisión unánime al capitalino Arturo “bam bam” Hernández, quien ofreció una gran pelea en contra del prospecto cancunense que tuvo una noche complicada ante este “chaparrón”, quien salió muy mañoso arriba del cuadrilátero.
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Ante ello, Castro Olivares mantuvo lo invicto ante el “bam bam” Hernández, al que derrotó por decisión unánime, en una contienda dónde el oriundo de Ciudad de México realizó una pelea encaminada a mantenerse en el cuadrilátero de pie y salvar su mandíbula-la cual considera las más fuerte del boxeo-libre del volado que lo mandara a la lona del representante del gimnasio “World Champions” de Cancún.
Por lo que el “bam bam” logró su cometido sabedor que no podía vencer a Celex, sí consiguió complicarle la vida al quintanarroense y durante seis rounds usó cualquier artimaña para escapar de la distancia de Castro, ante el escurridizo pugilista de la Ciudad de México.
Incluso, el capitalino se animó a soltar volados que impactaron en la humanidad del invicto caribeño, los cuales no mermaron al ganador de la doble medalla de oro de la Olimpiada Nacional CONADE:
Fue hasta el noveno round donde Castro empezó a meter más las manos y con dos rectos de derecha logró hacer daño en el rostro de Hernández, quien siguió haciendo su pelea.
No obstante que el “bam bam” conectó algunos golpes que no hicieron mella Castro, quien propuso el ataque durante todo el combate, por lo que logró salir con la victoria ante un rival que solo vino a sobrevivir contra el quintanarroense y salvar el auto mote de “la mandíbula más dura del boxeo”.
