Las intensas lluvias registradas esta semana en Cancún, sumadas a las deficiencias del sistema de drenaje pluvial, provocaron un notable ausentismo escolar en ambos turnos. Cientos de madres y padres de familia optaron por no enviar a sus hijos a clases ante los encharcamientos y el caos vial que se agudizó durante las horas pico.
Para el ciclo escolar 2025, la Secretaría de Educación de Quintana Roo (SEQ) tiene registradas más de 3,500 escuelas en todo el estado, de las cuales más de 620 se ubican en Cancún, entre instituciones públicas y privadas, atendiendo a aproximadamente 256 mil estudiantes de nivel básico.
A través de redes sociales y grupos de mensajería como WhatsApp, directivos y docentes de distintos planteles recomendaron a las familias no salir de casa para evitar riesgos. Esto debido a las complicaciones generadas por las precipitaciones, que superaron los 75 milímetros, según datos de Protección Civil, pese a que inicialmente se preveían entre 25 y 50 milímetros.
“Tanto la semana pasada como esta, las lluvias pusieron en evidencia la falta de drenaje y de pozos de absorción que funcionen, ya no digamos al 100 por ciento, ni siquiera al 50”, señaló Luisa Romero, madre de familia con dos hijos en la primaria Nicolás Bravo.
Relató que, cada vez que llueve con intensidad, se repite el mismo escenario: calles inundadas, transporte colapsado y retrasos generalizados, lo que dificulta el acceso a las escuelas.
Por su parte, Rufino Pech, otro padre de familia, comentó que sí llevó a sus tres hijos a clases, pero durante el trayecto observó varios vehículos y motocicletas varados por los encharcamientos, una situación que calificó como peligrosa.
Protección Civil informó que las lluvias estuvieron asociadas al paso de la onda tropical número 36, que también generó fuertes vientos en otras regiones del estado.
Ante este panorama, las autoridades educativas reiteraron que la seguridad de la comunidad escolar es prioritaria y exhortaron a los planteles a mantener sus protocolos de emergencia, revisar el estado de sus instalaciones y mantener comunicación constante con padres y madres de familia.
