Se extiende la alerta por retos virales que exponen a menores en plataformas como TikTok; primero fueron los padres quienes advirtieron sobre los riesgos, ahora fue la psicóloga Candy Raygoza.
“Ese reto viral conocido como ‘Sí que puedes’ lejos de ser una tendencia inofensiva, constituye un mecanismo de riesgo para niños y adolescentes”, expresó la especialista con maestría en psicoterapia humanista.
Explicó que el reto utiliza psicología inversa: el menor enuncia primero una prohibición social (“no puedo”) y luego la contradice (“sí puedo”), generando la sensación de autonomía y decisión personal.
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Resaltó que, desde la psicoterapia, este formato no es casual, ya que este tipo de dinámicas es frecuentemente observado y aprovechado por adultos que buscan captar menores, ya sea para grooming y extorsión, con el fin de comercializar material sexual infantil. Dijo que el reto funciona como un filtro de identificación: quienes cruzan el límite quedan expuestos y localizables.
Indicó que el tema ha sido abordado con otros expertos en salud mental y coinciden en que la vulnerabilidad aumenta porque en la adolescencia, el desarrollo cerebral aún privilegia la respuesta emocional e impulsiva sobre la evaluación de consecuencias.
Resaltó que la necesidad de pertenecer y ser validado vuelve los retos efectivos, sobre todo cuando no existe información ni diálogo en el entorno familiar.
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Enfatizó que es fundamental que los adolescentes sepan que ningún desafío justifica ponerse en riesgo, que no están obligados a participar para ser aceptados y que cualquier contenido que sexualice, presione o pida secreto debe ser bloqueado y reportado de inmediato. “Hablar con un adulto de confianza es una medida de protección, no una falta”, expresó.
Aseveró que para los padres, la prevención comienza con la conversación: explicar con claridad que las redes sociales no son espacios neutros; hay personas adultas observando y buscando este tipo de contenidos.
Resaltó que pedir fotos, retos sexuales o confidencialidad es una señal clara de alerta, por lo que es fundamental mantener el vínculo abierto sobre el control excesivo.
“Si un menor participó en este reto, la recomendación es no regañar ni romper la comunicación. El miedo y la vergüenza son los principales aliados de los depredadores”, resaltó la psicóloga.
Dijo que estos casos deben denunciarse ante la Policía Cibernética, 911 en el apartado de delitos digitales, Guardia Nacional o Fiscalías estatales especializadas, pero también es indispensable reportar el contenido dentro de la plataforma y conservar evidencias sin difundirlas.