Pilar Faller Menéndez “Dijeron que antiguamente, se fue la verdad al cielo;
tal la pusieron los hombres, que desde entonces no ha vuelto.”
Lope de Vega
Los hombres justos son aquellos que anteponen la verdad de las cosas a sus propios intereses. Muchos han perdido la vida en ello, por no traicionar lo que piensan y valoran por sobre todas las cosas, ya que en la verdad está implícita la honestidad y la sinceridad, así como la buena fe.
Es tan compleja y a la vez tan valorada que ha sido estudiada desde tiempos remotos por los filósofos griegos, y el criterio para definirla, porque puede también estar relacionada con el conocimiento de hechos o la constitución de Todo. Buscar la coincidencia entre una afirmación y los hechos, o bien, la realidad de lo que se afirma, guardando una fidelidad a esa idea.
Se ha usado en un sentido técnico para poder explicar criterios tanto en la teología, ciencia, como en la lógica, en las matemáticas o la filosofía. Esta última ha tenido muchas definiciones sobre su significado, desde tiempos remotos cuando los filósofos griegos discutían y proponían sus teorías acerca de ella.
Probablemente Lope de Vega, en sus versos, se sintió defraudado por la mentira, porque la verdad sigue aquí, a pesar de que muchos no quieran verla ni decirla, porque todavía hay quienes luchan todos los días por ella e incluso han dado su vida por que se sepa. Sigue siendo un ideal por el que muchos luchan para hacer justicia a los que no tienen voz, y para dar a conocer lo que realmente es, sin matices ni interpretaciones, a lo que muchos podrían definir como una actitud idealista, pero necesaria, porque si existe la mentira, tiene que existir la verdad.
La verdad debe estar arraigada en el corazón de cualquier ser humano que se precie de tener honor, debe ser una bandera que se debe ondear en todo momento y no dejar que esa llama se extinga, para que nunca se vaya al cielo y pueda con su luz opacar a la mentira y a la falsedad, y se deje ver y sobre todo sentirse. Porque solamente en la verdad, encontraremos la libertad.