Desde Celestún hasta El Cuyo, más de 10 mil pescadores se encuentra inactivos desde hace un par de días por el cierre de los mercados nacional y extranjero.
En la zona industrial de Yucalpetén, así como en los refugios pesqueros de todos los puertos de la costa, se encuentran amarradas miles de embarcaciones ribereñas, así como de las flotas mediana y mayor, lo que representa pérdidas para los hombres e mar. En los próximos días deben arribar algunos barcos tipo cobralínea que salieron hace 20 días a la captura de especies como huachinango.
En el refugio pesquero La Caleta de Progreso, la inactividad es total, salvo algunos pescadores que para aprovechar un poco el tiempo dan mantenimiento a los motores de las embarcaciones, en tanto que otros están enfocados en trabajos de carpintería y el calafateo de los alijos.
La actividad en los astilleros disminuyó de manera gradual esta semana, luego del anuncio de que la salida de los barcos para la temporada del mero, que inicia este primero de abril, se pospondrá mínimo 15 días e incluso podría alargarse hasta más de un mes, es decir, hasta mediados de mayo.
(José Manrique)