PROGRESO, Yucatán, 4 de junio.- En estos tiempos de fuertes lluvias y de rachas de vientos huracanados, si pidieron comida con servicio a domicilio que sean pacientes, debido a que las calles están inundadas y llenas de baches.
Así que se les pide a todos que sean pacientes, sus pedidos llegarán, pero por las condiciones climáticas se atrasan, esto fue expresado por la señora Maribel Cruz, dueña de una cocina económica.
Estos jóvenes o personas adultas encargadas de llevar la comida a las personas que no pueden salir, ellos son prácticamente unos héroes imparables, aun en esta contingencia sanitaria COVID-19.
Se vuelven un enlace con el exterior, al llevar sobre todo comida o medicinas y en ciertos casos hasta productos perecederos a las casas de familias, que no pueden salir por la contingencia sanitaria.
Un repartidor trabaja en 3 tiempos, muy temprano en los desayunos, almuerzos o cenas , ahora tienen todas las condiciones adversas, sobre todo por la lluvia que reduce la visibilidad por las calles que están inundadas y ahora llenas de baches.
También se han dado los casos de que son impactados por algún conductor, que hace caso omiso a los discos de alto o manejan a alta velocidad, como pequeña empresa se está generando una fuente de ingreso, para que sostengan a sus familias, sobre todo ahora que el trabajo escasea.
Cuando llegue el repetidor trátelo bien, dé una buena propina, a muchos les ayuda, sobre todo que arriesgan su vida para llevar alimentos, medicamentos, piezas automotrices, en fin.
Ahora que se generó más empleos con los repartos de cerveza a domicilio, donde las agencias contratarán a dos o más, con un cargo extra al producto para que salga para su sueldo, más propinas.
Ahora hasta mujeres se suman a esta actividad comercial, que es muy común en el puerto, sobre todo por la comodidad y la facilidad esto resulta al llevar el producto a casa, comercio u oficina, sean como clientes amables, pacientes y generosos a la vez.
(Texto y foto: Alfredo Canto May)