Las emociones estuvieron ayer a flor de piel en esta comunidad, donde una multitud se congregó para despedir a San Bartolomé Apóstol, patrono de la localidad, durante la misa y procesión que marcó la despedida y el regreso de la sagrada imagen a su nicho, con lo que concluyó formalmente la fiesta anual tan esperada por pobladores y visitantes.
Con una mezcla de alegría por la fe compartida, y una punzada de nostalgia por el fin de las festividades, cientos de feligreses acompañaron a la venerada imagen en su última procesión del año, en medio de aplausos, cantos y alabanzas.
El ambiente se sentía cargado de devoción desde las primeras horas; la parroquia, adornada con flores y estandartes, se convirtió en el epicentro de un acto de fe multitudinario para darle el último adiós al patrono, antes de que fuera regresado a su vitrina de cristal en el centro del altar.
Al son de la música de banda y los cánticos de la gente, la efigie de San Bartolomé fue llevada por las calles del pueblo, mientras los fieles caminaban a su lado. Los aplausos y los voladores resonaron por cada rincón, con un eco de gratitud y cariño hacia su protector.
Las familias se saludaban y sonreían, compartiendo la dicha de este día tan especial. Tras la procesión emotiva, la imagen regresó a la iglesia para su última veneración, donde cientos de personas formaron filas para despedir a San Bartolito.
El párroco Francisco de Borja Cervera Canto, con palabras de esperanza y reflexión, agradeció la participación de todos e invitó a mantener viva la fe durante todo el año, y no sólo en las fiestas patronales.
Finalmente, la sagrada efigie fue devuelta a su nicho, un acto que simboliza el cierre de un ciclo. La gente se despidió de su santo con la certeza de su protección durante todo un año. El adiós fue un hasta pronto, lleno de la esperanza que sólo la fe puede dar.
Las calles del pueblo, antes llenas de música, baile y fiesta, quedaron en un silencio sereno, testimonio de una celebración que ha llegado a su emotivo final. “Hasta el siguiente año, confiamos en que nuestro patrono cuidará de nosotros e intercederá con Jesús para colmarnos de bendiciones”.
