ESCARCEGA, Campeche.-Cansados de tantos accidentes y del escándalo que arman por las noches, habitantes de la Junta Municipal de División del Norte exigen a la presidenta de la misma, Gladis Cruz Moo, solicitar la colaboración de la Dirección de Seguridad Pública, la Policía Estatal Preventiva (PEP) o de las instancias que correspondan, para poner un freno a los motociclistas que merodean por el pueblo a exceso de velocidad.
“Son jóvenes que están poniendo en riesgo sus vidas y las de terceras personas, y si sus padres no tienen la autoridad suficiente para ponerles un alto, a pesar de ser ellos mismos los que les compran sus motos y les dan dinero para modificar sus escapes y hacer esos escándalos por las noches, sin dejar dormir a la gente que se tiene que levantar temprano a trabajar, queremos que sean las autoridades las que lo hagan”, expusieron.
Martirio
Residentes de esa Junta Municipal, entre ellos Celeste N. R. y Francisco P.R., manifestaron que lo que inició como un pequeño hobbie para los jóvenes de la localidad, se ha convertido en un auténtico dolor de cabeza, ya que son horas de la madrugada y no dejan de recorrer las calles haciendo escándalos con sus escapes modificados, sin tomar en consideración que la gente que reside en su mayoría se dedica a las labores del campo.
“Aquí la gente se tiene que levantar muy temprano, y eso desde luego que no les importa, ni a ellos, ni a sus padres, ni a la presidenta de la Junta Municipal, Gladis Cruz Moo, quien debería citar a los padres de esos muchachos y dialogar respecto a lo que está ocurriendo, a la manera en que se andan estrellando a cada rato”, añadieron.
Indicaron que la juventud de División del Norte está poniendo en peligro sus vidas y la de sus familiares, quienes en cualquier rato pueden ser atropellados por esos irresponsables adolescentes que no han podido disciplinar sus padres, y que evidentemente están pasando por encima de la autoridad de la Junta Municipal, a la que le exigen operativos policíacos para aplicar la ley, ya que conducen sin casco, sin licencia de manejo y sin placas.
(Texto: Martín Contreras / Fotos: Martín Contreras / Especial)