El presidente y fundador del Grupo Unido Campechano, Javier del Carmen Bello Avila, dio a conocer que en las elecciones que se llevaron a cabo en las 36 secciones del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), el pasado 17 de los corrientes, los secretarios generales que estaban en funciones aplicaron el terrorismo sindical, para que los trabajadores acudieran a las urnas y votaran por el candidato de la única planilla que registraron. Agregó que hubo presión y amenazas a los trabajadores, en el sentido de que si no apoyaban a la única planilla, les quitarían las plazas, no los jubilarían o, en su caso, a sus hijos no les darían la ficha.
Bello Avila dijo que no hubo una apertura, una libertad de voto, democracia, ni autonomía sindical; “todo fue una simulación de una aparente libertad a los trabajadores sindicalizados para emitir su voto, pero quedó demostrado que nada más fue una simulación y un circo para justificar que los trabajadores están totalmente de acuerdo”, sostuvo.
En esas elecciones, indicó que no hay nada que ocultar, pues en las secciones 47 y 42 en Ciudad del Carmen imperó una serie de amenazas: “si no votas por mí, ya no vas a trabajar”, “te quito la plaza”, “pierdes la jubilación”, “no le doy ficha a tu hijo”. Situación donde los trabajadores prácticamente por intereses personales acudieron a las urnas; pues si no trabajan, no comen. Esa presión de los líderes de las secciones sindicales petroleras, dijo, no es más que una dictadura y actúan con un terrorismo sindical; y la palabra “terrorismo sindical” no se encuentra en las leyes.
“Pero lo utilizan para presionar a los trabajadores, pues no se encuentran en los estatutos, pero lo emplean los líderes de las secciones sindicales petroleras y violan los estatutos y no llevan a cabo las elecciones de forma transparente. Esto no es más que temor de los representantes de las secciones sindicales que están dando patadas de ahogado, pues saben que a partir del 1 de diciembre, cuando inicie la nueva administración federal, las cosas van a cambiar y los van a poner en su lugar”, añadió.
Agregó que no se puede “tapar el sol con un dedo”, pues existe represión no sólo en Ciudad del Carmen, sino en todas las secciones sindicales, para que apoyaran a los secretarios generales; “se les presionó, se les intimidó, se les coaccionó, para que apoyaran a los candidatos de las planillas únicas, para los secretarios generales”, sentenció.
Sostuvo que muchos petroleros tuvieron temor porque los obligaron a apoyar al candidato de la planilla única para secretario general de las secciones sindicales, pero la gente ya no quiere participar con esos líderes petroleros, sólo lo hicieron bajo la amenaza, bajo la coacción.
Finalizó mencionando que el 1 de diciembre, cuando Andrés Manuel López Obrador (AMLO) inicie sus actividades como Presidente de México, van a cambiar muchas cosas, entre ellas, la situación que impera en los sindicatos, llámese de ferrocarrileros, petroleros, entre otros, en donde ha imperado la corrupción.
(Texto: Fernando Kantún / Fotos: Fernando Kantún / Especial)