
José Alfredo Caamal Moo y Pedro Caamal Chablé, agente municipal y comisario ejidal de la pequeña comunidad de Rancho Sosa, lamentaron que sus vecinos de la comunidad de Yaxché Akal no quieren organizarse y se unan a ellos para rellenar los enormes baches del camino estatal que conduce a ambas localidades.
Expresaron que el camino estatal entronque con la vía federal 261 Hopelchén–Bolonchén de Rejón, lleva a la zona arqueológica de Santa Rosa Xtampak y es de 32 kilómetros.
Detallaron que los primeros 12 kilómetros son del camino a Rancho Sosa y los siguientes siete kilómetros más se llegan a la comunidad de Yaxché Akal, por lo que dijeron que los pobladores de esta última localidad saldrían beneficiados si se organizan y se unen a ellos, para rellenar no solo lo que resta de los 12 kilómetros que conducen a Rancho Sosa.

Aunque dijeron que no existe ningún conflicto entre pueblos vecinos, dijeron que si ellos se organizarían, también podrían rellenar los otros siete kilómetros que lleva hacia su localidad, pues al final de cuentas ellos salen beneficiados, pero en cambio nos han dejado solos en el relleno de los primeros 12 kilómetros en donde ellos también transitan a diario para ir a la cabecera municipal y de retorno a su localidad.
Mencionaron que en esos días cuando ellos están rellenando los baches, han pasado los pobladores de Yaxché Akal con quiénes no tienen ningún tipo de problema, los saludan como si nada, y tampoco como cortesía les llevan agua y algo de comer, cuando están realizando el bacheo que también a ellos les beneficia.
Las autoridades de Rancho Sosa mencionaron que, debido a las malas condiciones del camino de acceso a su localidad y antes que quede peor cuando se regularicen las lluvias, decidieron organizarse junto con menonitas de la comunidad de Santa Fe que tienen cultivos de maíz y de soya en la región.
Revelaron que desde hace casi un mes están rellenando con material blanco (sascab) los enormes baches que hay en los primeros 12 kilómetros de ese camino estatal. Ellos cubren sus gastos de traslado del material blanco y del combustible de sus camionetas, además de los gastos de alimentación, agua y refrescos.

Sabemos que el sascab es un material que no dura mucho tiempo, y cuando llueva fuerte y con el paso de los vehículos ese material no va a aguantar mucho, por eso requieren que las autoridades intervengan con material de asfalto para rellenar los baches.
Caamal Moo y Caamal Chablé, quiénes también pertenecen al grupo de Sembrando Vida “Much pakal kuxtal” de la comunidad de Rancho Sosa, señalan que desde las primeras horas de cada día inician con el bacheo de ese camino, y tratan de avanzar lo que puedan, pues lo que ellos quieren es cuando menos mejorar en parte el tránsito vehicular en ese camino.
El mantenimiento y en este caso la reconstrucción del camino de acceso a nuestra comunidad, compete a las autoridades estatales y federales, por ser un camino de índole estatal, pero ante el abandono de esas autoridades y al ver que no hay intención y voluntad de sus autoridades, han decidido hacerlo ellos mismos.
Hemos tocado puertas en todas las dependencias, no solo del gobierno estatal sino también al gobierno federal, porque el camino lleva a la zona arqueológica de Santa Rosa Xtampak, pero nos han dicho que no hay presupuesto para esos trabajos de reconstrucción del camino, externaron.

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Indicaron que nadie les devuelve los gastos que conlleva esos trabajos, pues dijeron que el sascab lo extraen de los bancos de la propia comunidad de Rancho Sosa, y ahí se ahorran un dinero, y con ayuda de menonitas que ponen remolques, ellos tratan de avanzar con esos trabajos de relleno del camino.
Por último, pidieron a las autoridades correspondientes que los volteen a ver, porque están olvidados y no cuentan con el apoyo o el respaldo de sus autoridades competentes, pues indicaron que ese camino es de índole estatal, y pidieron de nueva cuenta a la gobernadora Layda Sansores mirar a esa región chenera que está olvidada.
JGH