Posterior al hallazgo del cuerpo de Efraín López Jiménez, de 53 años, durante la mañana del domingo 28 de diciembre en el río de Candelaria, los trabajos de investigación sumados al resultado de la necropsia descartaron que la víctima tuviera huellas de violencia, quedando su fallecimiento como fallas cardiacas.
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Durante las primeras diligencias, las autoridades descartaron que se tratara de una muerte violenta, luego de que los resultados forenses confirmaran que el deceso fue por causas naturales. Los restos presentaban un avanzado estado de descomposición, con daños visibles en ambos brazos y una de sus piernas, producto del tiempo de permanencia en el agua.
Tras practicarle la autopsia de ley, el Servicio Médico Forense determinó que la causa del fallecimiento fue un infarto agudo al miocardio, sin que se encontraran indicios de agresión física, lesiones dolosas o participación de terceros.
