Luis Carlos Coto Mederos
333
Y yo que no tengo cuota
Emelina, mi señora,
tiene una zafra muy buena
y si el gobierno no ordena
no puede moler ahora.
Tiene caña Combatora
Especial y Medialuna,
Pepecuca tiene alguna
y también mucha Pe O Jota
y yo que no tengo cuota
no puedo moler ninguna.
Jesús Herrera Rodríguez
334
Chivando y sapeando
(Rivalidad de los
bandos parranderos)
EL CHIVO
Oye sapo, te prevengo
que te seco la laguna,
esta vez sin duda alguna,
no es de amigo lo que tengo.
Este año sabrás que vengo
muy dispuesto y arrollando,
cómo voy a gozar cuando
ante mis carrozas caigas,
traigas todo lo que traigas
te vas a morir brincando.
EL SAPO
Mira, chivo maromero,
alardoso y berreador,
que yo soy el vencedor,
lo conoce el pueblo entero.
A mi paso, considero,
que vas a pedir socorro,
yo desluzco, te borro,
y cuando caigas vencido,
vas a lanzar un berrido
que ni el bombazo del Morro.
EL CHIVO
No intentes, sapo baboso,
amenazarme, que ya
todo preparado está
para verte sin reposo.
Se prepara el pueblo ansioso
para ver tu destrucción,
si entramos en discusión,
vas a perder tus honores,
a fuerza de volares
yo te quemo el barrigón.
EL SAPO
No te impongas, chivo viejo,
anda con mayor cautela:
a mí me sobra candela
para quemarte el pellejo.
Te vas a quedar perplejo,
te vas a morir de grima,
el momento se aproxima
de ver las definiciones:
carrozas y cabezones
te pasarán por encima.
Leoncio Yanes
335
Vida moderna
Llegó la electricidad
al barrio de La Gotera,
ahora la barriada entera
vive con comodidad.
La mulata Caridad
compró un refrigerador,
Juan tiene un ventilador,
Yoyo vendió la vitrola
y ya puso en la consola
un lindo televisor.
Don Francisco Remolacha
acompañado de un güiro
ya liga el punto guajiro
con rock and roll y guaracha.
Botó el mortero Natacha
y compró una batidora,
y su sobrina Pastora,
que parecía un esqueleto,
ha engordado por completo
con la saya engañadora.
Guillermo compró un tractor
para ir a la bodega
junto con Antonio Ortega
a ver el televisor.
La abuela de Nicanor
ya no quiere trabajar:
manda a su nieta a fregar,
no hace ni pescado frito,
pues dice que Clavelito*
la ha mandado a reposar.
La señora de Fambá
fue a cantar a una estación,
gustó en la televisión
y se quedó por allá.
Figúrense como está
que sale con un cantante.
Fambá se quedó vacante,
y dijo con ansiedad:
–¡Fuera la electricidad,
que vuelva la luz brillante!
Giordano Correa
*Clavelito: Adivino estafador radial.