VARIAS CAPITALES, 28 de marzo (AFP/EFE/REUTERS).- La pandemia del coronavirus volvió a golpear con especial dureza a Italia y España este sábado, con más de 1,700 muertos entre ambos países y el nerviosismo creciente de la población.
Europa, que superó este sábado la cifra de 20,000 muertos causados por el nuevo virus, ya representa dos terceras partes de los más de 30,000 muertos por el COVID-19, un virus que se ceba en la franja de población con más edad, y para el que no hay vacuna por el momento.
España registró 832 defunciones en un día, un triste récord en medio de tensiones por la falta de material para los médicos y enfermeras.
El gobierno del socialista Pedro Sánchez, que tiene poderes especiales gracias al estado de alarma, ordenó que los trabajadores que no estén empleados en los sectores esenciales del país se queden en casa durante 15 días, para doblegar como sea la propagación de la enfermedad.
España cerrará dos semanas sus actividades no esenciales para fortalecer la lucha contra la enfermedad, anunció este sábado el presidente del gobierno.
Italia, por su parte, ya superó la cifra de 10,000 muertos (y 92,000 casos). Este sábado reportó 889 fallecidos, apenas un ligero descenso respecto a la víspera.
Madrid y Roma insisten en que la epidemia da muestras de estabilizarse. En Italia la tasa de contagio va bajando, y en la región de Lombardía, la más afectada (+40,000 casos), los hospitalizados solo han aumentado en 15 casos en las últimas 24 horas (11,152 en total).
En España (más de 72,000 contagios) “estamos llegando ya al pico de esta curva (de casos) que tanto nos preocupa”, indicó Fernando Simón, director del centro de emergencias sanitarias.
Pero la carencia de mascarillas, de guantes, de trajes de protección, desgasta enormemente al personal sanitario, tanto en Europa como en Estados Unidos. En España, más de 10.000 contagiados trabajan en el sector sanitario.
“Esto es un tsunami total” dice a AFP Pablo Rodríguez, un radiólogo del madrileño Hospital de la Princesa.
Francia e Italia aceleraron los traslados de enfermos a Alemania con la colaboración del ejército alemán este sábado, pues los hospitales en sus países de origen están congestionados.
Gran Bretaña registró en las últimas horas 260 nuevos muertos con lo que ya son más de 1,000 los fallecidos por la epidemia, según un balance oficial difundido el sábado, lo que supone una rápida propagación en el país.
El número de casos confirmados en todo el mundo superó los 600,000 el sábado. En total, hay más de 649.000 casos y más de 30,000 decesos. Más de 130,000 personas se han recuperado ya, según conteo de la Universidad Johns Hopkins.
España endurece el confinamiento
España paralizará desde mañana lunes todas las actividades laborales no esenciales para restringir aun más el movimiento de personas y contener el contagio de coronavirus, que da algunas muestras de moderación.
El Gobierno aprobará este domingo la nueva medida “excepcional”, que refuerza el confinamiento de la población en las viviendas decretado el 14 de marzo para luchar contra la pandemia, anunció el jefe del Ejecutivo, el socialista Pedro Sánchez, en conferencia de prensa.
Los trabajadores de esos sectores no esenciales (quedan excluidos los medios de comunicación) tendrán un permiso retribuido “recuperable” durante ese período, que incluye ocho días laborables. Recibirán su salario “con normalidad” y luego, cuando terminen las restricciones, recuperarán el tiempo paulatinamente.
Es una “alternativa al cierre total” del país que piden algunas regiones, como Cataluña, con el objetivo de mantener temporalmente los bajos niveles de movilidad de la población, sobre todo de los fines de semana, según el Gobierno,
Y es “un paso más” aprovechando la Semana Santa, ya que no se podrá viajar por las restricciones generales.
Son medidas de “extraordinaria dureza”, reconoció Sánchez, “consciente del sacrificio”, pues el coronavirus afecta a España de manera “despiadada”.
El gobernante español reclamó a la Unión Europea que ofrezca “unida” una respuesta económica y social conjunta: es una “catástrofe que nos afecta a todos”, argumentó.
“Errores trágicos”
A este problema se le añade otro en el horizonte. En Sicilia y el sur de Italia se han producido ya las primeras escenas de saqueo. La parte de la población que trabaja en el sector informal, que no puede acogerse a las ayudas oficiales para los trabajadores en paro forzoso, exige comida.
El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, pidió a la Unión Europea que no cometa “errores trágicos” en la gestión del coronavirus para evitar que el bloque “pierda su razón de ser”, en declaraciones publicadas el sábado en periódico Il Sole 24. Conte anunció el gobierno distribuirá bonos alimentarios.
En Francia (más de 2,300 muertos), que ha tenido que mandar enfermos graves a Alemania ante la congestión de sus hospitales, los próximos 15 días “serán más difíciles” aún, advirtió el primer ministro, Edouard Phillippe.
Rusia cerrará totalmente sus fronteras terrestres, a partir del lunes, después de haber suspendido casi todas las conexiones aéreas esta semana.
Los líderes de la UE se dieron el jueves dos semanas para hallar una respuesta común para contener el impacto económico del coronavirus, en una tensa cumbre por videoconferencia que confirmó la división del bloque.
Alemania rechazó la creación de los llamados ‘coronabonos’ y abogó por el uso del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), el fondo de rescate de la zona euro.
El primer ministro, Edouard Philippe, explicó que Francia está “todavía al comienzo” de la epidemia y que los días venideros serán “difíciles”.