Un artefacto explosivo fue arrojado al interior de un bar en el municipio de Pedro Escobedo, Querétaro, lo que provocó una movilización inmediata de fuerzas de seguridad federales y estatales, aunque sin que se registraran personas lesionadas, debido a que la granada no detonó.
De acuerdo con los primeros reportes, los hechos ocurrieron en el bar La Farmacia, ubicado sobre Avenida Panamericana, esquina con 16 de Septiembre, en la cabecera municipal.
çTestigos señalaron que varios hombres a bordo de una camioneta Jeep Grand Cherokee con vidrios polarizados se detuvieron frente al establecimiento y uno de ellos descendió para lanzar una granada de fragmentación al interior del lugar.
Gran movilización tras el ataque
Luego de que el artefacto cayera dentro del bar y no explotara, los asistentes permanecieron resguardados en el inmueble, mientras los encargados del negocio dieron aviso inmediato al número de emergencias 911.
La llamada detonó un operativo coordinado en el que participaron elementos de la Guardia Nacional, policías estatales y personal especializado en manejo de explosivos.
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Las autoridades establecieron un perímetro de seguridad para evitar riesgos a la población y permitir la intervención de equipos especializados, quienes finalmente aseguraron la granada sin que se registraran daños mayores.
De manera paralela, se desplegó un dispositivo de búsqueda para intentar localizar la camioneta y a los presuntos responsables, quienes huyeron del sitio con rumbo desconocido.
Antecedente de violencia en bares de Querétaro
El ataque ocurre un año después del atentado al bar Los Cantaritos, en la capital queretana, un hecho que dejó 10 personas muertas y que marcó un punto de inflexión en la percepción de seguridad del estado. En aquel caso, las autoridades confirmaron que al menos una de las víctimas era objetivo de un grupo delictivo.
Hasta el momento, las autoridades no han confirmado detenciones ni el móvil del ataque en Pedro Escobedo, aunque se mantiene abierta una investigación para determinar si el hecho guarda relación con disputas del crimen organizado o si se trató de una amenaza directa contra el establecimiento.
El gobierno estatal reiteró que no hubo explosión ni víctimas, pero subrayó que se reforzará la presencia de seguridad en la zona para prevenir nuevos incidentes y garantizar la integridad de la población.
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