El volcán Kilauea, ubicado en la isla Grande de Hawái, volvió a registrar una intensa actividad eruptiva al expulsar lava hasta 122 metros de altura durante la víspera de Navidad, como parte de una erupción intermitente que se mantiene activa desde diciembre de 2024, de acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Este episodio marcó la erupción número 39 del año en el cráter del Kilauea, consolidando a 2025 como un periodo de alta actividad volcánica.
Las autoridades informaron que el flujo de roca fundida permaneció confinado dentro de la caldera, localizada en el Parque Nacional de los Volcanes de Hawái, por lo que no se reportaron viviendas ni poblaciones en riesgo.
Erupción intermitente y sin riesgo inmediato
Según el USGS, el evento fue precedido por salpicaduras esporádicas y pequeños desbordamientos que comenzaron horas antes.
Cada uno de los episodios eruptivos ha tenido una duración aproximada de un día o menos, con pausas de varios días entre cada fase, un comportamiento que los especialistas califican como típico del actual patrón del volcán.
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En ocasiones recientes, las torres de lava generadas por el Kilauea han alcanzado alturas comparables a rascacielos, un fenómeno que se explica por la acumulación de gases volcánicos en el magma, los cuales se liberan de forma violenta al ascender por conductos estrechos y tubulares hasta la superficie.
Ubicación estratégica y monitoreo constante
El Kilauea se localiza en la isla de Hawái, la más grande del archipiélago, a unos 322 kilómetros al sur de Honolulu, capital del estado situada en la isla de Oahu. Es considerado uno de los volcanes más activos del planeta y forma parte del grupo de seis volcanes activos que existen en Hawái.
Las autoridades mantienen un monitoreo permanente de la actividad sísmica y volcánica, especialmente por el interés turístico que generan estos espectáculos naturales.
Visitantes y residentes han compartido imágenes y videos del fenómeno, particularmente durante la noche, cuando el resplandor de la lava es más visible.
Aunque por ahora no se reportan afectaciones, los expertos reiteraron la importancia de seguir las indicaciones oficiales y respetar los perímetros de seguridad establecidos dentro del parque nacional, ante la posibilidad de nuevos episodios eruptivos en los próximos días.
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