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Quintana Roo

Artesanos en crisis

Por Luis Enrique Cauich

 

KANTUNILKÍN, LÁZARO CÁRDENAS, 14 de mayo.- Por ahora se dedica únicamente a la reparación de hamacas en su domicilio en la ciudad de Kantunilkin a causa de la pandemia, este es el caso de don Edmundo Cauich Kau, quien ha mantenido en pausa su trabajo de elaborar hamacas, debido a que sus compradores son foráneos y por los filtros sanitarios no pueden llegar hasta este lugar.

A consecuencia del coronavirus, los artesanos de Lázaro Cárdenas no cuentan con empleo, puesto que sus principales compradores son turistas de paso o personas de fuera que llegaban a la ciudad ocasionalmente.

Aun cuando no hay un padrón oficial de artesanos en el municipio se estima que hay alrededor de 300, quienes se dedican a diversas actividades como el tallado de madera, urdido de hamacas, elaborar figuras con material marino, entre otros materiales y quienes pasan una dura situación económica a consecuencia de la pandemia del coronavirus.

Edmundo Cauich Kau, un veterano urdidor de hamacas, señaló que ahora sólo se dedica a reparar hamacas que la misma gente de la ciudad le lleva y con ello obtiene algunos recursos con los que sobre lleva la pandemia, pero el trabajo es escaso, puesto que no está urdiendo hamacas por la falta de clientela.

Relató que sobrevive con la reparación de hamacas, pero confía en que la situación irá mejorando, ya que por ahora nadie está comprando sus productos porque tampoco tienen ingresos económicos y ahora es difícil comprar una hamaca que va desde los 500 hasta los mil pesos, dependiendo del tamaño de la figura.

Cauich Kau agregó que con el poco material que han acumulado han estado elaborando nuevas hamacas para que se entretengan en esta cuarentena pero, sobre todo, con la esperanza de que alguien les pueda comprar para que mejorar la difícil situación que están viviendo a consecuencia de la pandemia.

 

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