
Quintana Roo registró la tasa de matrimonios más alta del país, pero también hubo un repunte en los divorcios.
La Estadística de Matrimonios 2024, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Historia (Inegi), reveló que si bien a nivel nacional la tasa de matrimonios reportó un decremento de 0.1 puntos respecto a la de 2023, en Quintana Roo se registró un alza de 1.16 puntos.
De acuerdo con el informe oficial, Quintana Roo alcanzó en 2024 alrededor de 14 mil 619 matrimonios, colocándose como la entidad con mayor proporción de uniones civiles del país, con 7.7 por cada mil habitantes de 18 años y más, por arriba de la media nacional de 5.4.
En ciudades como Cancún y Playa del Carmen, la industria turística también impulsa este fenómeno, con ceremonias que atraen a parejas locales para consumar su matrimonio en las costas del Caribe Mexicano.

De acuerdo con los cálculos realizados a partir de las tasas publicadas, durante el año pasado, en la entidad se registraron 14 mil 520 matrimonios entre hombres y mujeres, además de 72 uniones entre personas del mismo sexo: 30 de féminas y 42 de varones.
La psicóloga Roxana Fidelbus comentó que el aumento, tanto de matrimonios como de divorcios, es muestra de un cambio cultural más amplio: la gente se casa todavía en gran número, pero también permite romper vínculos cuando la relación deja de ser saludable.
Además de los matrimonios entre los quintanarroenses, también se reportaron más de 130 mil bodas de extranjeros en el Caribe Mexicano, según la Asociación Mexicana de Mujeres Empresarias.
Se dio a conocer que la mayoría de los quintanarroenses prefieren esperarse entre los 25 a 29 años para casarse, cuando hace una década, lo común era que entre los 21 y 23.

En México, durante 2024 se registraron 486 mil 645 matrimonios, con lo que se obtuvo una tasa nacional de 5.4 matrimonios por cada mil habitantes de 18 años y más. En 2015, el índice fue de 6.9, reveló el Inegi.
De acuerdo con la Estadística de Matrimonios (Emat) 2024, dadas a conocer este lunes, las entidades federativas con las tasas más altas de matrimonios por cada mil habitantes de 18 años y más fueron Quintana Roo, con 7.7; Sinaloa, con 7.1, y Campeche, 7.0. Las que presentaron las tasas más bajas fueron Tlaxcala y Ciudad de México, con 3.4 cada una y Puebla, 3.6.
Al momento de contraer matrimonio, siete personas eran menores de edad. Michoacán presentó dos casos y Chiapas, Durango, Nuevo León, Quintana Roo y Sonora, uno cada una.
Se registraron 6 mil 312 matrimonios entre personas del mismo sexo: 3 mil 879 de mujeres y 2 mil 433 de hombres
Divorcios
Contrario a esto, son al menos 360 parejas al año las que toman la decisión de disolver su contrato matrimonial, lo que representa un divorcio por día.
Este porcentaje de divorcios significa un factor común, ya que las cifras locales están dentro de la media nacional, incluso desde la pandemia, cuando se pensó que hubo más rompimientos matrimoniales.
A nivel nacional, Quintana Roo ocupa el décimo lugar con mayores tasas de divorcios de 18 años y más: casi 2.2 por cada mil habitantes.

El Inegi detalló que nueve de cada 10 divorcios son por mutuo consentimiento, lo que refleja un cambio en la manera en que las parejas gestionan el fin de su relación. A diferencia de décadas pasadas, cuando los procesos legales eran largos y complicados, hoy la mayoría de las separaciones ocurren mediante juicios más ágiles e incluso, en línea.
Otro dato relevante es la duración de los matrimonios antes del divorcio. En promedio, las parejas en México se separan tras 17 años de matrimonio, aunque en la Península este índice tiende a ser menor, cercano a los 15.

El aumento en los divorcios también habla de cambios culturales. Cada vez más personas priorizan el bienestar individual y de sus hijos por encima de mantener un matrimonio infeliz.
Como señaló el propio informe, “los divorcios no necesariamente reflejan una crisis social, sino una transformaciónen la manera en que se conciben las relaciones de pareja y la familia”.
En términos prácticos, el dato nacional de 1.9 divorcios por cada mil habitantes puede parecer pequeño, pero si se aplicara a una ciudad como Mérida, equivaldría a más de 2 mil separaciones en un sólo año, un número que da cuenta de la magnitud del fenómeno.