Permanece sin respuesta la petición para reclamar tumbas olvidadas en el panteón de Calderitas, ante el riesgo de exhumación de restos humanos, dio a conocer el Alcalde Sergio Uh.
Uno de los principales problemas es la elevada cantidad de nichos abandonados, lo que limita a los habitantes para contar con un espacio en el camposanto donde puedan sepultar a sus seres queridos.
A pesar de que en agosto del 2024 el alcalde Sergio Uh Tejero convocó a los propietarios a acudir para identificar y reclamar sus sepulcros, hasta el momento sólo 20 de los 850 nichos han sido reconocidos, cifra que no alcanza ni el 3% del total de tumbas existentes en el lugar.
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Al respecto, Uh Tejero dio a conocer que aproximadamente el 30 por ciento de las sepulturas pertenece a familias de Chetumal, así como de las comunidades Laguna Guerrero y Luis Echeverría Álvarez, cercanas a Calderitas.
El edil explicó que, en años anteriores, estos poblados carecían de un panteón propio, motivo por el cual numerosas familias recurrieron a esta comunidad para dar sepultura a sus familiares en dicho cementerio.
En el caso de las familias chetumaleñas, detalló que optaron por este panteón debido a los costos accesibles, los cuales resultaban menores en comparación con las tarifas de los panteones ubicados en la capital de Quintana Roo.
Como consecuencia de esta situación, múltiples tumbas han permanecido alrededor de 15 años sin mantenimiento, lo que las coloca en riesgo de exhumación en caso de que sus propietarios no acudan a reclamarlas.
De igual manera, Tejero señaló que la saturación del panteón ha generado inconformidad entre los pobladores más antiguos de Calderitas.
Indicó que muchos residentes originarios solicitan sepultar a sus familiares en la tierra que los vio “crecer y morir”; sin embargo, la carencia de espacio los ha obligado a utilizar áreas sobre otras sepulturas, al grado de que existen estructuras con hasta tres nichos colocados uno sobre otro, situación que consideran inapropiada y poco respetuosa para la memoria de sus difuntos.