Elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE), a través de la Fiscalía Especializada en Combate a los Delitos de Secuestro y Extorsión, lograron rescatar a dos menores de edad que se encontraban en riesgo de ser secuestrados, asimismo, los elementos de la FGE lograron evitar que sus familiares pagaran una gran suma de dinero que pedían para su rescate.
De acuerdo con la declaración de los elementos de seguridad, los hechos ocurrieron cerca de las 11:00 a.m. en el municipio de Othón P. Blanco, luego de que la madre de la víctima recibiera una llamada en la que un grupo criminal le notificó que habían detenido a su hijo, junto con su novia, ya que se encontraban involucrados en acciones de compra-venta de droga en un bando criminal contrario al suyo, de modo que al no pertenecer a la susodicha banda criminal, fue capturado en compañía de su novia, por lo que le permitieron pedir un rescate por 300 mil pesos por cada uno.
Así pues, ante el susto que le provocó el acontecimiento, la madre del afectado cortó la llamada y en compañía de su esposo acudieron al establecimiento en el que labora su hijo, negocio que se encontraba cerrado, de manera que volvieron a llamar, por lo que los supuestos captores de los menores de edad le advirtieron que si en realidad le importaba la vida de su hijo, tenía que entregar 150 mil pesos por su vida, mientras que la liberación de la segunda víctima, es decir, la novia de su hijo, sería aparte.
Aunado a ello, los presuntos captores amenazaron a los padres del joven, advirtiéndoles que, si no realizan el pago, atentarían contra el establecimiento en el que trabaja con el uso de una granada y armas de fuego, así como les reiteraba que no debían informar del caso a ninguna autoridad. No obstante, ante la incertidumbre de la situación, los padres de la víctima inmediatamente se pusieron en contacto con los elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE), en compañía de los familiares de la segunda víctima, con la intención de presentar la denuncia y localizar a los jóvenes.
Pocos minutos después de la denuncia, los policías de Investigación de la FGE determinaron que las llamadas de extorsión provenían del penal de Altamira, en el estado de Tamaulipas, por lo que implementaron un operativo de búsqueda para dar con el paradero de las víctimas. Posteriormente, por medio de los trabajos de campo, tecnológicos y de gabinete llevaron a los agentes de la Policía de Investigación al motel en el que estaban los jóvenes, quienes fueron rescatados ilesos y reunidos con sus familiares.
Tras acudir al lugar de los hechos, la víctima dio a conocer a los oficiales que recibió una llamada en la que le decían que su número telefónico estaba siendo empleado para llamar a la línea de emergencias 911, para reportar personas armadas, convoyes y puntos de venta de drogas. De modo que cuando informó que no había sido él, le dijeron que necesitaban investigar, ya que el presunto responsable de la extorsión trabajaba para una dependencia gubernamental, pero que a la vez era encargado de un grupo delictivo.
Asimismo, el joven agregó que un grupo criminal contrario estaba clonando celulares para evitar su grupo entrara a Chetumal, por lo que necesitaba verificar si no trabajaba para alguno es estos y que de ser así lo iban a privar de la vida. Al darse cuenta de que estaba acompañado por su novia, le pidieron los datos de ella y les ordenaron trasladarse a un motel, sin cortar en ningún momento la llamada.
Por último, la Fiscalía General del Estado (FGE), exhortó a la ciudanía, para que, en caso de recibir llamadas extorsivas, acudan sin dudar a denunciar los hechos ante la Fiscalía General del Estado.