
Con la llegada del periodo vacacional de verano, el Centro de Mérida se llena no sólo de visitantes y compradores, sino también de jóvenes que aprovechan el receso escolar para incorporarse temporalmente al mundo laboral, generando un movimiento positivo en el mercado interno y fortaleciendo las actividades comerciales en el corazón de la ciudad.
De acuerdo con cifras recientes de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STyPS) federal, Yucatán cuenta con 1.9 millones de personas en edad de trabajar (15 años o más), de las cuales 1.23 millones forman parte de la Población Económicamente Activa (PEA). De ese total, 1.2 millones se encuentran ocupadas, y 19 mil personas están en búsqueda de empleo.
Respecto al empleo formal, se reportan 525 mil personas afiliadas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), lo que representa un 23.3% del total, mientras que el empleo informal suma 696 mil trabajadores, equivalente al 1.9% del total.

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Por sectores, el comercio se posiciona como el principal empleador en el estado con 93 mil 201 trabajadores registrados ante el IMSS, seguido por los servicios sociales y comunales con 91 mil 884, y la industria de la transformación con 87 mil 291.
Este fenómeno, visible año con año, cobra fuerza durante el verano, especialmente en comercios del primer cuadro, donde los empleadores encuentran en los jóvenes de entre 18 y 30 años una fuerza laboral dispuesta, entusiasta y flexible para cubrir los picos de demanda.
“Estoy trabajando como ayudante en una tienda de ropa desde hace una semana. Me gusta porque aprendo sobre atención al cliente y además gano un dinero extra que me sirve para comprar mis cosas personales”, compartió Daniela Campos, de 19 años, estudiante de administración.
Como ella, muchos jóvenes encuentran en este periodo una oportunidad para adquirir experiencia laboral. Juan Miguel, de 21 años, empleado en un restaurante del Centro, indicó: “Es mi segundo verano trabajando aquí. Ya conozco el movimiento y me ha servido para mejorar mi trato con la gente y aprender a manejar dinero”.
Otro factor que incentiva a los jóvenes a incorporarse al mercado laboral, incluso de forma temporal, es el incremento sostenido del salario mínimo, que pasó de $88.4 pesos en 2018 a $278.8 pesos en 2025, lo que representa un crecimiento del 215%. Esto ha hecho que más jóvenes consideren atractivo aprovechar el verano para generar ingresos y ahorrar o apoyar en sus hogares.