Un amplio operativo de seguridad se registró ayer en el periférico de Buctzotz tras un reporte que alertaba sobre una persona presuntamente arrollada y sin vida a un costado de la carretera.
Sin embargo, lo que parecía una tragedia terminó siendo una falsa alarma: el supuesto fallecido estaba simplemente dormido… y en evidente estado de ebriedad.
De acuerdo con testimonios de testigos, automovilistas y peatones que transitaban por el periférico, al observar lo que parecía el cuerpo de un hombre entre la maleza, inmóvil y en posición sospechosa los alarmó por lo que dieron aviso a las autoridades.
La escena llevó a muchos a pensar que se trataba de una víctima de atropellamiento. El reporte fue tomado con seriedad por la Policía Municipal, cuyos elementos acudieron de inmediato al lugar para atender lo que creían era una emergencia mayor. La sorpresa llegó al revisar de cerca el supuesto cuerpo: no se trataba de un muerto, sino de un conocido vecino de la localidad, identificado como Bartolo, quien se encontraba profundamente dormido entre los arbustos, bajo los efectos de las bebidas embriagantes.
Bartolo, como es ampliamente conocido en la comunidad, es un bebedor habitual que ha protagonizado diversos episodios similares. En esta ocasión, su borrachera provocó una fuerte movilización de los cuerpos de emergencia, quienes tras comprobar que no había ningún delito o accidente, procedieron a trasladarlo a su domicilio para evitar que corriera algún peligro.
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El insólito hecho se volvió rápidamente tema de conversación entre los vecinos de Buctzotz, muchos de los cuales señalaron con humor que no estaba muerto, estaba de parranda, en referencia al popular dicho mexicano.
Las autoridades municipales hicieron un llamado a la ciudadanía a reportar cualquier situación sospechosa, pero también exhortaron a evitar el consumo excesivo de alcohol en la vía pública o sus alrededores, ya que, como en este caso, puede generar confusión y distraer recursos importantes de seguridad.
Aunque todo quedó en una anécdota, lo sucedido refleja la necesidad de fomentar el consumo responsable de bebidas alcohólicas en la comunidad.
