Campeche / Ciudad del Carmen

El suicidio no distingue edad ni estatus económico, advierte especialista en Carmen

UNACAR llama a fortalecer la prevención del suicidio desde la infancia
UNACAR llama a fortalecer la prevención del suicidio desde la infancia / Perla Prado Gallegos

El estrés acumulado, las rupturas sentimentales o los conflictos familiares pueden ser detonantes en jóvenes, mientras que en adultos se suman factores económicos, laborales y sociales. Por esta razón, el suicidio es un problema de salud pública creciente en México, y desafortunadamente Campeche ocupa uno de los primeros lugares a nivel nacional en tasas de incidencia, alertó el doctor Alberto Daniel Fuentes Lugo, director de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Autónoma del Carmen (UNACAR), en el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio.

De acuerdo con el académico, en México se registran cerca de nueve mil muertes por suicidio al año, siendo los estados del sureste —Campeche, Yucatán y Quintana Roo— los que presentan tasas más altas en relación con su población. Más del 65 por ciento de los casos corresponden a varones, siendo la asfixia por ahorcamiento el método más común; en mujeres es frecuente el envenenamiento por sustancias.

Noticia Destacada

Mitos y realidades del suicidio en Campeche: señales que no deben ignorarse

“Así como tenemos salud física, debemos atender nuestra salud mental. Muchas alteraciones comienzan con angustia, depresión o ansiedad, y si no se tratan pueden evolucionar hasta intentos de suicidio, sobre todo en jóvenes con mayor fragilidad emocional. Son más hombres los que mueren, sí, pero las mujeres podrían estarlo intentando más veces sin lograrlo”, señaló.

El académico subrayó que la red de apoyo familiar es determinante en la identificación de problemas de salud mental que llevan a la ideación suicida, advirtiendo que si la familia no cumple un rol protector puede convertirse en una fuente adicional de estrés.

Agregó que la prevención no debe recaer solo en psicólogos, sino también en médicos generales, enfermeras y profesionales de la salud, quienes suelen ser el primer contacto para detectar signos de alerta.

“El suicidio no distingue estatus económico ni edad. Lo vemos en adultos mayores, pero también en niños, quienes tienen menos habilidad para afrontar problemas. Entre los síntomas comunes en menores están: autolesiones leves, falta de apetito, sueño excesivo y decaimiento anímico sin causa médica aparente. Estos signos deben ser atendidos de inmediato”, advirtió.

Finalmente, destacó la importancia de visibilizar el tema y conmemorar fechas como el 10 de septiembre, insistiendo en que universidades, instituciones de salud y gobiernos deben trabajar juntos en campañas de prevención y ferias de salud.