
Durante la conferencia de prensa de este miércoles, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, explicó que la decisión de trasladar a integrantes del crimen organizado a Estados Unidos responde a que en ese país ya cuentan con procesos judiciales abiertos y acusaciones formales por diversos delitos.
El funcionario señaló que el principal beneficio para México es que, al cumplir su condena fuera del país, estos delincuentes dejan de operar desde las cárceles mexicanas, donde en algunos casos seguían ordenando extorsiones, homicidios y otros ilícitos.
“El beneficio para nuestro país es que, al sacarlos, ya no podrán seguir operando contra la sociedad mexicana”, puntualizó.
Criterios para futuras extradiciones
A pregunta expresa sobre si habrá más traslados de este tipo, el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, señaló que este tipo de acciones se realizan únicamente a petición de un país solicitante y tras un análisis del Consejo Nacional de Seguridad.
Explicó que la solicitud debe estar debidamente fundamentada, con procesos judiciales coincidentes entre los delitos que persigue la justicia mexicana y los que se les imputan en el extranjero. “Si hay otra solicitud en el futuro, se considerará y, si es procedente, la vamos a cumplir”, afirmó.
Contexto reciente
Las declaraciones se dieron tras el traslado de 26 líderes criminales a Estados Unidos, realizado el 12 de agosto, como parte de una estrategia para reducir la violencia y el riesgo de corrupción penitenciaria.
Con estas medidas, el gobierno federal busca reforzar la seguridad nacional y enviar un mensaje de que no habrá tolerancia ni espacio para que los capos continúen operando desde territorio mexicano.
IO