
La organización ambientalista internacional Greenpeace México asegura que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) autorizó a la empresa Cemex la deforestación y voladura de cerca de 650 hectáreas de selva en las inmediaciones de Tulum. Esto ocurrió luego de que la dependencia federal emitiera un comunicado negando dicha aprobación, la cual posteriormente fue eliminada de su página oficial.
La agrupación precisa que, con esta autorización por parte del Gobierno federal, Cemex podrá extraer cerca de 13 millones de toneladas de material pétreo durante un periodo de 15 años, a través de un esquema de explotación intensiva que representa un grave riesgo ambiental y social para la región.
Uno de los aspectos más alarmantes, señala, es que se pretende utilizar el camino que atraviesa la comunidad Francisco Uh May para el tránsito constante de camiones pesados, sin que se haya realizado consulta pública a sus habitantes. La afectación a la salud, al tejido comunitario y a la tranquilidad de la zona sería directa, señaló.

Noticia Destacada
Tulum enfrenta su peor Verano en años; comerciantes reportan ventas nulas y playas semivacías
El pasado 7 de julio, Greenpeace México realizó una protesta en la delegación de la Semarnat en Cancún, con el objetivo de exigir al organismo que detenga las autorizaciones para explotar bancos de material pétreo en la selva maya, conocidos como sascaberas. Entre éstas, destacaron el resolutivo otorgado a Cemex para deforestar y dinamitar cerca de 650 hectáreas de selva virgen en las inmediaciones de Tulum, firmado y resuelto el 27 de enero de 2025.
En respuesta, el 11 de julio pasado, la Semarnat emitió un comunicado en el que aclaró que la empresa fue notificada, el 27 de junio, mediante el oficio 03/ARRN/0820/2025, sobre la negativa de autorización del Estudio Técnico Justificativo para el Cambio de Uso de Suelo en Terrenos Forestales (CUSTF).
Este trámite va aparejado a la evaluación de impacto ambiental, de acuerdo con lo establecido en el Reglamento de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente en Materia de Evaluación de Impacto Ambiental.
Horas después de que se emitió el boletín de prensa aclarando la negativa de permisos a favor de Cemex para la extracción de material pétreo, la información fue eliminada del portal de la Semarnat.
Por ello, la agrupación ambientalista precisó que, al buscar la supuesta negativa en la Gaceta Ecológica (canal oficial de la Secretaría para publicar resoluciones), no se encontró ninguna resolución pública negando la autorización.
“El único documento que tenemos en mano es una copia del resolutivo núm. 04/SGA/1532/2024, donde sí se aprueba el proyecto para su Etapa 1, que consta de 572,685 metros cuadrados. También, al ingresar el número de bitácora (23/MP-0072/02/24) para buscar el trámite en el portal de la Semarnat, el proceso aparece como culminado con la entrega del resolutivo anterior. No hay ninguna negativa”, aseguró la organización.
Expone que la zona de extracción se encuentra en un área de alta fragilidad hidrológica, ya que forma parte del sistema de ríos subterráneos Ox Bel Ha, una red vital del Gran Acuífero Maya, interconectada entre ramales que nacen en la Península y descargan agua dulce en el Caribe.
Cualquier alteración en este sistema —como la fragmentación del suelo kárstico, el uso de explosivos y el desmonte— pondría en peligro el mayor sistema de agua subterránea del país.
“Lo mínimo que se espera de la Semarnat es transparencia real. Si de verdad quieren proteger la selva maya, es necesario que publiquen la supuesta negativa de inmediato”, reitera Greenpeace México.
Mientras tanto, las sascaberas siguen avanzando, y muchas son operadas por la Sedena. A medida que la Semarnat emite declaraciones, el resto de las sascaberas —casi 30 fueron autorizadas este año a dicha institución militar— siguen devastando sin freno, sostuvo la organización.