En este año, un total de 6 restaurantes y puestos de comida en Othón P. Blanco fueron detectados con la presencia de heces fecales, fauna nociva y productos caducados durante las diversas actividades de supervisión sanitaria realizadas por la Comisión Federal Para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), de Chetumal, señaló Javier Torres Viveros, titular de la dependencia.
Torres Viveros señaló que las jornadas abarcaron revisiones en más de 5 mil puestos de comida situados en Othón P. Blanco.
En ese sentido, explicó que la fauna nociva corresponde a la presencia de ratas, cucarachas y moscas en la cocina.
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Mencionó que la presencia de estas criaturas son un riesgo para la salud humana, ya que pueden transmitir enfermedades, causar daños físicos o contaminar alimentos y espacios.
Entre los alimentos caducados, destacó los productos como la leche, crema, huevos, vegetales, carne y frutas, cuya condición es susceptible a sufrir daños con el incremento de las altas temperaturas.
Destacó que el descuido de los productos puede provocar enfermedades gastrointestinales, y aseveró que durante todo el año solo se denunciaron dos casos.
A raíz de ello, señaló que durante el mes de diciembre reforzarán las medidas de sanidad en los restaurantes, pues en esta temporada suelen registrarse más visitas a los establecimientos de este tipo por la presencia tanto de turistas locales como extranjeros.
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Mencionó que la COFEPRIS expide al menos 5 requerimientos de sanidad de que varían según el establecimiento o producto, pero generalmente incluyen identificación oficial del representante legal, comprobante de domicilio, plano del local y una descripción de los procesos e higiene.
Las visitas abarcan restaurantes, fondas, supermercados, hoteles, loncherías, bares, cantinas, taquerías, coctelerías, panaderías y otros puestos comerciales, con el objetivo de garantizar que los alimentos y bebidas que se expenden en la capital del estado cumplan con las condiciones de higiene y calidad requeridas.
Asimismo, las autoridades se encargan de supervisar la efectividad de los servicios de fumigación y limpieza.
Evalúan la eficacia de sus procedimientos y la calidad de los químicos que emplean para exterminar la fauna nociva.
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Señaló que los establecimientos con irregularidades detectadas mantienen un plazo de 40 días para atender las observaciones hechas por la dependencia.
De manera que en caso de gestionar las anomalías serían multadas con sanciones económicas.
Aconsejó a la ciudadanía acercarse denunciar los establecimientos cuyo manejo de alimentos no cuentan con las medidas de sanidad, pues el beneficio es tanto como para los clientes como para los propietarios del recinto.