
Las autoridades pidieron a automovilistas no estacionarse cerca de las zonas de anidación de tortugas en el playón de Chuburná, respetando los espacios destinados para dejar sus vehículos, con el fin de no dañar los espacios que utilizan los quelonios durante esta temporada.
Ante la intensa actividad que se vive en las comisarías de Progreso, el playón de Chuburná que tradicionalmente recibe una fuerte cantidad de visitantes, ahora luce con mucha más gente. Por lo anterior, desde hace unas semanas el personal de la Comuna, junto con voluntarios del campamento tortuguero del Cetmar, colocaron letreros informativos para restringir el acceso a las zonas de arenales, debido a que éstos son usados para el desove de los quelonios.

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El comandante de la Policía Municipal de Progreso, Omar de la Cruz Herrera Cocom, indicó que como parte de las labores de vigilancia policiaca, se llevan a cabo rondines constantes en dichas zonas, exhortando a los conductores a respetar los espacios destinados para estacionar los vehículos, ubicados a varios metros de la orilla del mar, y sólo se puede ingresar a pie a las playas. Tampoco se permite el paso a personas que llegan a caballo.
Herrera Cocom indicó que en caso de no acatar las recomendaciones de las autoridades, o reincidir en el acceso a este tipo de lugares en la forma que se indica, la Policía está facultada para aplicar sanciones administrativas.
Peor aún, en caso de que se dañen nidos de tortuga, o que por estas acciones se mate a un quelonio, el caso se convierte en un delito federal, por lo que los responsables serán detenidos y turnados ante las autoridades correspondientes.
Por ahora, según se indicó, se busca crear conciencia en turistas y personas de la localidad para respetar esos lugares, evitar el ingreso de autos, y reducir al máximo los daños que se pudieran causar a los nidos y tortugas que se avistan en el lugar.
Desgraciadamente, hay personas que a pesar de que observan las restricciones por medio de cintas que buscan proteger las zonas, simplemente las rompen o pasan sin darles importancia, y al momento de ser amonestados alegan que “las playas son públicas”, y ante tal situación se les indica que pueden pasar a pie, pero no en vehículos.