
Los constantes fenómenos naturales y las ondas tropicales, están ocasionando una baja en la captura de pulpo y mero, aseguraron pescadores, quienes afirmaron que apenas logran traer entre 10 y 20 kilos por jornada.
El pescador Miguel Chan explicó que esta situación no es redituable, ya que tan solo en combustible invierten más de dos mil pesos, monto que apenas recuperan con la captura que obtienen.
Además, el bajo precio del molusco ha desanimado a los pescadores, quienes esperaban que, ante la escasez, el producto se pagara mejor. Varios señalaron que la captura ilegal también ha afectado el mercado, pues aseguraron que algunas congeladoras han estado comprando pulpo durante todo el año a trabajadores furtivos, en especial a buzos que llegan de otras zonas del estado a depredar las especies.
Por su parte, Martín Martínez comentó que, hasta la fecha, el precio no mejora, por lo que muchos prefieren mantener sus embarcaciones atracadas, ya que la cantidad de pesca posible no alcanza para cubrir gastos como gasolina y carnada.
Sobre los fenómenos naturales como las lluvias y tormentas, junto con las constantes ondas tropicales, han provocado la interrupción de la actividad pesquera de los trabajadores.
A esto se suma que la inversión inicial aún no se recupera, pues se destinó dinero a jimbas, plomos, hilos pulperos, además del hielo, combustible y víveres, que no se han logrado costear con la baja captura actual.
Martínez agregó que el clima no ha sido favorable para la pesca del pulpo y otras especies como el mero. Las tormentas impiden que las embarcaciones y chalanas gareteen, lo que evita que el pulpo abrace la carnada. Este fenómeno, presente desde el inicio de la temporada, ha limitado la captura a entre 10 y 20 kilogramos por embarcación.
Los trabajadores esperaban que en septiembre mejoraran las condiciones climáticas para reactivar la pesquería artesanal y obtener mejores dividendos, pero los constantes fenómenos naturales siguen afectando el lecho marino.